Me abro al cierre

-Prólogo

El tejado de mi casa es muy travieso. Cuando quiere se desencaja de la cima de las paredes y se va a tomar el viento, es decir, que se va a dar un paseo por hay. Y cuando llora el cielo, y a este le entran unas ganas locas de volar, nos deja a todos calados hasta los huesos.

Bueno, ahora te lo explicaré desde el principio: cuando yo tenía dos años, mis padres querían vivir en un sitio independiente y alejado, y se vinieron a vivir aquí, es decir, a la casa en medio de el campo, solitaria pero divertida, aburrida pero entretenida, al ser la causa de que tengo amigos, no humanos pero amigos; estos son: mi perro Liny, la ardilla, el gorrión, el periquito y la gata de la granja.

Era un día soleado cuando me levanté por la mañana. Bajé a la cocina a desayunar. Había torrijas y leche. Cuando terminé, me vestí y me aseé, y me bajé al campo a jugar con mis amigos, cuando bajo, vi algo diferente, era nada menos y nada más que el tejado de mi casa, se llamaba Gully, pero todos le llamábamos Tyny el loco, al ser motivo de que hace lo que quiere. Nos lo pasamos genial: jugábamos a la pelota, al pilla-pilla, al escondite, etc. Pero cuando estábamos jugando al escondite, Tyny se cayó y se hizo un agujerón. Los padres nos hecharon la bronca del siglo y nos dijeron que ahora tendrían muchas goteras, entonces el periquito tuvo una idea: dijo que podiamos ir montados en el tejado hasta la gran ciudad para que arreglaran al tejado. Todos estabamos de acuerdo, los mayores porque podrían disfrutar de las vacaciones extra sin niño y nosotros porque ibamos a ir a la gran ciudad. Partiriamos la semana que viene.

Cuando me levanté, lo primero que hice fué mirar por la ventana. No hacía mal tiempo, aunque un poco nublado. Me vestí, desayuné y me aseé y me fui a desayunar. Después de unos 30 minutos, Liny, la ardilla, el gorrión, el periquito y la gata de la granja nos pusimos encima de Tyny. Este empezó a levantarse. Saludamos a los mayores.

Como había un largo viaje, los mayores nos prepararon una comida estupenda: bizcocho de todo tipo de sabores, limonada, fruta, y muchas cosas más.

El viaje muy fué tranquilo. Tardamos dos horas: empezamos a ver unas casas, que al orden se iban poniendo más grandes. Casi en el centro de la ciudad, vimos una tienda de arreglar tejados, bajamos suavemente y entramos a la tienda. Estaba llena de jente con tejados rotos o descoloridos. Eramos los cuartos en la fila. Como ya era hora de comer, nos fuimos a un restaurante chino. Había una comida muy buena. Pasada una hora salimos del restaurante, nos montamos encima de Tyny y a volar. El viaje no fué muy largo, parecido al de ida, cuando legamos a casa los padres nos habían preparado una fiesta sorprendente. Estamos todos muy alegres porque el tejado estaba muy nuevo, aunque travieso como siempre.

*

[Descripción de una persona]

Se llama Alba. Es una chica alta y delgada. Tiene el pelo largo negro como el tizón. Sus ojos son brillantes y tan grandes que parece que se le van a salir de la cara. La boca siempre abierta y risueña, deja ver unos dientes blancos perfectos.

Le encanta vestirse con una camiseta amarilla y unos pantalones de tirantes verdes como los de un jardinero, también le gusta llevar un sombrero de paja, un gran bolso y unas botas de goma grandes.

Es una chica muy simpática y divertida, aunque es nueva en la clase ya tiene muchos amigos. Es gran aficcionada a las conchas marinas que le encanta enseñarnos.

Como le gusta mucho hablar se pasa los recreos contandonos historias de cada concha.

*

[Descripción de persona que más me gusta estar]

Mi primo.

Se llama Andrés. Tiene 9 años, ya para los 10. Tiene la cara regordeta, aunque no mucho; Tiene el pelo rubio y rizado. No le importa que ropa llevar. Es bromista y sonriente. Le gusta el fútbol y jugar a la play station.

Vive en Sevilla. Va a un colegio francés. Su padre es profesor y su madre fiscal. Tiene una hermana de 2 años menos que él y se llama Estrella. Tiene dos gatos: Fernandita y su madre que no me acuerdo como se llamaba.

Le gustan los dibujos animados. No le interesa mucho la música. Y no es muy alto. Es muy ansioso con todos los muñequitos y con los helados y chuches.

*

[Autoretrato]

Me llamo Daniel. Tengo 11 años. Tengo el pelo alborotado y negro. Los ojos pequeños, cejas grandes, nariz chata y boca no muy grande. Tengo los mofletes flacos y las orejas pequeñas. Soy alto y delgado, piernas grandes y brazos. Los ojos los tengo de color marrón oscuro. Tengo la cabeza alargada. Me gusta jugar al baloncesto, ir al cine y (jugar a) (ir a comer a) (bii) bolleyball. Me gusta la comida árabe e italiana. También me gusta la música jazz y rock.

*

[Dictado de “El hombrecito de la lluvia”, Gianni Rodari]

Yo conozco al hombrecito de la lluvia. Es un hombre ligero; muy ligero, que vive en las nubes, que salta de una nube a otra sin hundir el blando y vaporoso pavimento. Cuando se despierta exclama: “¡Pobre de mí, quién sabe cuanto habré dormido!”Mirando hacia abajo ve la tierra seca y humeante sin una gota de agua.

[Continuación libre]

Entonces, rápido como un ciclón, este intenta que las nubes lloren un poco, pero estas también están secas. Entonces intenta conectar con (en) lo más profundo del alma, con el Sabio Sin Nombre, Rey de las Cuatro Estaciones. Y este le contestó, con la palabra de que fuera a sus mansiones. Y el gracioso personaje, hizo el viaje que ningún Maia nunca hizo: visitar a la maxima autoridad. Él (que es como llamaban a este rey) vivía en lo más alto y profundo de la Tierra, que solo podías visitar si el quería o lo presenciaba.

El Maia viajó por un laberinto gigante, con solo la preposición de que iba a llegar, y al cabo de 2 días, este llegó. La residencia de Él era una gran montaña. Le recibió, y le dijo que cuál era el problema, y el Maia dijo: “Al levantarme por la mañana, una oscura sombra fue la primera imagen que vieron con cierto recelo mis ojos. Rápido y veloz me desperté, pero de nada sirvió, porque la sombra ya se había ido, y con ella había secuestrado a la lluvia. La lluvía, que confía en todes, creía que era un juego y no utilizó sus grandes poderes, y se las llevó.” Entonces, Él dijo: “Pocas veces te hablaré, y esta será una de ellas. Búscala, este es el sitio donde menos te lo esperabas, pero si no lo encuentras antes de mañana, dejarás de ser un espíritu al ser un humano, y lya te he dado una pista, y ahora vete.”

La lluvia estaba en el sitio donde menos te lo esperabas, y si no la encuentro, seré un humano, (pensaba) humano, humano ¡¡¡Ya lo tengo!!! Los humanos, la Tierra, (l)¡ahí es donde está la lluvia! Y con este descubrimiento termina la primera parte.

*

Érase una vez, mi primo de Valdemoro, con casi 25 años, cara redonda y regordeta, pelo negro y no muy corto, mirada desafiante, y de estatura 1,79, tenía una obsesión muy grande con los perros. Entonces, ¡dale con los perros! Vecinos de todos los pueblos le regalaban todos los perros que tenían; estos eran de todas las edades, de todas las razas, de todos los tamaños… Cuando ya había conseguido casi la doble docena, vino el problema más grande de todos. ¿Dónde los pondría? Y todos los perros que le regalaron hasta ese momento los devolvió.

Tuvo que dar cobijo a 21 perros en su casa, y desde ese momento, le llamaron “El de los Perros”. FIN

*

[Dictado]

Llegamos al refugio. La puerta chirrió, y percibimos un olor a fuego apagado.

Cuando nos acostumbramos a la penumbra del interior, pudimos ver una habitación acogedora. En la pared de la derecha, a gran altura, había un ventanuco por el que se escondía una enorme telaraña y debajo un montón de leña seca.

En el centro, una enorme mesa de madera rodeada de bancos que parecía invitarnos a merendar.

Continuación]

Llegamos al parque natural. Al principio de este, un pequeño (car) parking era casi lo único con claridad que percibían mis ojos. Porque más de un billón de árboles inundaba todo –o casi todo– el terreno, y en el centro (y) había un río con (su) un puente (aunque nuevo) muy bonito y todo.

Me daba la sensación de que estaba en el paraíso, porque el aire mejor del mundo estaba allí. Un valle pequeño y majo al lado del río fue una cosa de las que más me gustó. Alrededor, había muchos (al) árboles, y en el centro, todo estaba lleno de hierba limpísima y (grande) verde.

*

Mi madre es un poco pícara, juguetona, amable y sincera.

Le gusta la gente que es simple, lo contrario de ella.

Siempre está haciendo cosas, es divertida y le gusta la lectura.

Es alta y delgada, y siempre es amable. Cuando habla por teléfono, parece que está hablando con el rey de Roma.

Le gusta sobre todo el cine antiguo y las películas que reflejan algo catastrófico de la vida.

*

Diario del Capitán Volisbia, 24 de Febrero 3003

Aunque es inhumano, es imposible, estamos en una nueva pista de descubrir el catorceavo planeta,

Diario del Capitán. Senvio, 14 de Mayo 3003.

Hace unos meses, más o menos, escribí una página dónde ponía que íbamos a descubrir un planeta, y ya lo hemos hecho. Intentaré hacer una pequeña descripción:

Cuando bajamos de la nave, todo estaba muy oscuro. En cuestión de milésimas, una abertura se abrió debajo de nosotros y todos (excepto la nave) nos deslizamos por el abujero limpio y verdoso. Una hora más o menos estuvimos bajando y bajando por por esa especie de tobogán. Algunos se suicidaron presos de la locura y otros perdieron la vida por el susto y el pánico. En fin, cuando acabamos la especie de “atracción de la muerte” nos arrastramos a un pasillo gigante. Y unos retumbos horrorosos oía de repente. Porque unos S gigantescos hombres nos cogieron y nos llevaron a una ciudad. Pero no se si es conveniente que la llamemos “ciudad” porque era lo más precioso nunca visto por el hombre. Un montón de castillos de la edad media, rodeado de árboles y todo tipo de vegetales, fuentes que hechaban agua plateada que vañaba una plaza recubierta por una alfombra multicolor, rascacielos gigantescos que terminaban en punta, pirámides de egipto, templos griegos, casis parisinas… era una especie de ciudad-mundo, llamada, Tûna.

[Opina:

¿Te gustaría formar parte de una expedición?] No. [¿Por qué?] Porque sería arriesgado y clautofobico.

*

[8. Escribe cinco adjetivos para describir el carácter de tu maestra.]

Amable, desconfiada, inteligente, divertida, seria.

[9. Escribe su retrato interior con los cinco adjetivos.]

Pilar, mi profe, cuando la preguntamos alguna pregunta difícil pone una cara inteligente y seria, pero ella es siempre divertida menos cuando la cabrean. Es muy confiada y amable con la gente.

*

[Lengua. Relato]

“Esa noche no podía dormir. Tenía algo en lo más profundo de mi alma que me ponía muy nervioso. Me levanté y me fuí a beber un vaso de agua. Cuando llegué a la habitación, noté que una luz verdosa bañaba mi ventana. Fui rápido hacia ella y la abrí. Pude ver con mis propios ojos una inmensa mole de metal que llevaba unas pequeñas luces verdes. Como atraído por un imán, me fui acercando poco a poco, sin saber lo que hacía. Salí de mi casa y me dirigí al parque. Al llegar, vi que la inmensa mole de metal era una nave espacial. Intenté entrar en la nave, pero cuando la toqué con la suela del zapato, un montón de pequeños bichos (como pingüinos) aparecieron por todos lados y me cogieron. Yo no opuse resistencia, ya que eran muchos y estaban “armados”. y me llevaron a una especie de calabozo.

Después de unas horas, oí un leve zumbido: estabamos despegando. Y aquí sigo, escribiendo esta carta por si alguien la encuentra que por favor, me ayuden”.

*

[10. Escribe un relato de ciencia-ficción.]

Eran las 4:15 de la mañana. Me tocaba Consejo en la quinta. Salí de mi casa. Entré en mi taxi y en dos segundos ya estaba sentado en mi silla para el Consejo. Nuestro conjunto, es una organización secreta y muy importantes que se encarga de otros países, y planetas.

Estuvieran como 2 horas hablando de un planeta, de una misión… yo me dormí, y al cabo de media hora, alguien gritó mi nombre muy alto. Me di un susto, que casi caigo de la silla. Me ordenaron que tenía que ir a un planeta muy subdesarrollado, (llamado la Tierra) para descubrir a una banda de Adebarianos que se había colado en la Tierra sin el permiso de la NASA.

Yo estaba muy nervioso, porque nunca había hecho ninguna “misión x” (como llama mi madre)

Iba a salir dentro de 44,89 céntimas de segundo, a sí que no me dió apenas tiempo de despedirme y hacer la maleta. Cuando entré en la nave, me dió una sensación de frío interior. (así es como dice mi madre)

Iba a viajar 100.000.001.090.004 años luz, es decir, 4 días (un montón) ¡qué emoción!

Fin de la 1º parte (y última)

*

-¿Qué, qué hago aquí?

-Pues lo que tendrías que haver hecho hace mucho tiempo.

-¿Quién eres? ¡Ah, ya sé! ¡Te he pillado! ¡Este es un programa de T.V que hacen bromas! ¿Quién me lo habrá hecho? ¿Mi tía Kate? ¿Mis padres?

-¿Qué tonterías estás diciendo, Gilberto?

-¿M… ¿Qué? ¿Gilberto? Además de una broma tonta y pesada, es mala: ¡MI NOMBRE ES BLAIK! -Gritó el niño. – ¿(Oh) O, no es una broma? (…)

-Es verdad. Creo que te tendría que dar explicaciones. Hace mucho tiempo, creíamos que se iba a explotar el planeta; entonces mandamos llevar al pequeño príncipe a otro planeta, para, que cuando se explotara, nuestra raza no se extinguiera.

-Entonces, ¡ahora no me digáis que ese pequeño era “Super Mán”!

-Efectivamente. Y tú eres su nieto, y por eso vamos a llevarte de vuelta a nuestro planeta: Orión.

-¿Y mis padres, siguen viviendo?

-Claro. Son inmortales.

-¿Pero el planeta no se había explotado?

-No. Fué una equivocación.

-Y… ¿Inmortales? ¿Y Supermán, porque se a muerto?

-Le mataron.

-¿Quién?

-La misma persona que dijo que se iba a explotar el planeta.

*

En un pueblo, pequeño (más bien una aldea), en el(o) alto Pirineo, los habitantes del pueblo (todos personas jubiladas) se habían enterado que de el Alto Pirineo de Francia habían visto ir a un lobo a su pueblo. Todos los aldeanos, estaban muy preocupados, porque vivían a causa de la ganadería.

Pepe, que era el mayor de todos, por lo tanto “el jefe”, cogió una escopeta de su padre ya muerto y convocó una reunión en la vieja plaza del pueblo, al lado de la estatua de su abuelo. Al final, las abuelas y los abuelos, decidieron que por la noche, las personas más jóvenes (60 años) harían de vijilas.

Esa noche le tocaba de vijila a Juana, la mujer de Pepe. A las 12:30, esta ya estaba más frita que (un p) la arena de la playa.

Hoyó unos pequeños saltos, y cuando se levantó, vió a un inmenso lobo devorando a las gallinas. Juana cargo la escopeta, y de un disparazo se cargo al lobo en un plis plas.

Los habitantes se levantaron rapidísimo, y de la alegría por la muerte del lobo, achucharon a Juana tanto (como) que la tuvieron que llevar al Hospital.

*

[Relato Fantástico & Descripción del Museo Naval.

Descripción]

Cuando entramos, vimos una pequeña habitación con un vigilante muy tonto; nos hizo pasar por una especie de barrera para ver si teníamos armas; luego subimos por una escalera estrechísima y mal pintada a un pasillo que daba al vestíbulo. Este estaba adornado con un cuadro de Isabel (la) II (que fundó el museo), dos señores muy serios y muy bien vestidos y una señorita con un vestido horterísimo y rosa que tenía un pecho gigante y una tripa muy delgada. A continuación, entramos en otra sala con un barco (buque) muy grande y bonito, y dos cuadros que cada uno de ellos llevaba pintados a los Reyes Católicos; también había una (b)vajilla con la bandera de España al revés. Luego, un montón de salas con maquetas de barcos, buques, galeras hechas de huesos, armas, mástiles, camarotes, etc. la decoración era muy hortera: las paredes rosas con columnas verdes o viceversa. Bueno, resumiendo, ha sido una vista que ha merecido la pena.

[Relato fantástico. (No soy yo) →]

Entramos en el museo, llovía mucho; entonces subímos una escalera y entramos en el (b)vestíbulo. Tenía unos cuantos cuadros y 2 bancos. A mí me gustan mucho los barcos, por eso he querido venir al Museo Naval, porque tiene muchos barcos y objetos relacionados con estos.

Así seguimos como una hora, hasta que al final, un montón de agua vino con muchísima fuerza a chocarse contra nosotros; parecía un barco hundiéndose. Pero yo recorde que mi padre me había regalado antes de morir una maquinita que hacía grande las cosas, y este era el momento de utilizarlo. Y eso hice, cogí un barco y lo transformé, me monté en el y empecé a recoger a toda la gente.

Cuando ya habíamos recogido a todos salimos a la calle, y… ¡toda la ciudad estaba hinundada! porque había llovido tanto que todo Madrid se había inundado.

Todo el mundo tenía su barca, y en vez de ir en coche iban en su barquita que no contaminaba nada. Y Madrid, en vez de llamarse así, se llamó: “Hidromadrid”.

*

[descripción de un lugar de miedo.]

Traba (costa de la muerte)

Se puede decir que Traba es la más brava y grande playa que haya en Galicia. Las olas rúgen como leones, y sus (dimensiones) arenas repletas de algas, cactus, erizos, etc te hacen sentir incómodo.

Pero no es todo así, también tiene unas dunas cubiertas de restos de barcos que te hacen pensar si uno de estos trozos de madera hubiera pertenecido a un barco que se chocó contra las terroríficas rocas que pueblan la Costa de la muerte.

Nadie se atrebe a entrar en la playa por la noche, porque, como dice una leyenda, si entras en traba de noche, no saldrás de ella. Como la playa está en dirección Norte-Oeste, sopla un viento tan terrorífico y huracanado que te hacen pensar si vas a salir volando y caer en los leones que acarician la playa gigante.

*

[Relato de una pequeña historia de miedo]

Cuenta que, a las orillas del mar, existía una playa magnífica, con un oleaje estupendo y una gran variación de peces comestibles. Esta playa, había alejado a toda la gente de allí, porque todos decían que estaba gobernada por la bruja del mar, que, como decían ellos, si alguien toca el agua de esa playa pasará a ser gobernado por la bruja, y nunca más volvería a salir de las profundidades de el mar.

Pasados ya sus años, un grupo de pescadores que venían de la ciudad, decidieron pescar en esa playa, y a pesar de los consejos que les habían dado los de los pueblos más cercanos, estos no hicieron caso de nada. Como decían ellos que por la noche era cuando mejor pescaban, decidieron pescar esa noche, ni más ni menos que a media noche.

Cuando los pescadores tocaron la arena de la playa se produció un pequeño temblor, pero estos ni se inmutaron. Sacaron la barca al agua y se subieron en ella. Apenas el anzulo matar a un pequeño pez, las aguas se alzaron con una fuera terrible y se tragó a la barca. Los pueblerinos, como no volvían, fueron a buscarlos. Un mozo muy valiente dio un pasó y entró en la playa. Todos se creían que iba a morir, pero no le pasó nada. Entonces todos entraron en la playa, y hasta se bañaron, entonces sabieron que solo moría quien pescaba en la playa, y fué un lugar muy turístico, pero, como nó, se prohibió la pesca en esa zona.

*

[Describe el paisaje que has hecho en 8 o 10 líneas.]

Desde lo alto se puede ver la pequeña plaza de la iglesia, rodeada por unas casitas típicas de allí. Un poco más arriba, dos grandes casa hay con cada una su pequeño jardín.

Esta pequeña aldea tiene unos cuantos árboles. A la derecha, un gran río marcha a la “ventura” con un puente muy antiguo por encina. A la otra parte del río, un pequeño camino sigue su “camino”, independiente a los inmensos sembrados y bancales que hay por todas partes.

*

[Lengua. Dictado]

Hace mucho tiempo, en este lugar apareció un día una fuente, que bajaba de lo alto de la montaña. Una muchacha del pueblo llamada Blanca pasó un día de mucho calor junto a la fuente y se detuvo para colmar su sed. Esta muchacha tenía desde niña un brazo inutilizado por unas fiebres reumáticas de las que nunca logró recuperarse. Se agachó para beber y las gotas de agua cubrieron el brazo enfermo. La muchacha bebió, se refrescó las sienes y los brazos y siguió su camino. Este hecho se repitió varias veces aquel verano.

[Continuación libre]

La madre de Blanca, Lidia, estaba muy preocupada por ella. Todas las mañanas, a primera hora, salía de su casa e iba en dirección a la montaña. Venía a la hora de comer, muy alegre y sonriente. Además ya no tenía, fiebre, y el brazo lo podía mover un poco. Lidia temía que ella fuera a un curandero o algo así, porque tenían muy poco dinero y no podría pagarle.

Una mañana, antes de que Blanca se despertara, Lidia entró en su cuarto y la levantó. Le dijo:

-Blanca, cariño, ¿a dónde vas todas las mañanas?

-Mamá, lo siento, pero es un secreto.

-¡Pero, yo soy tu madre! Desde que murió papá ya no nos hablamos, ni me dices nada.

-Bueno, te lo contaré: ¿te acuerdas es día de mucho calor que fuí a dar un paseo?

-Espera… ¡sí!

-Pues me encontré una fuente. Yo tenía mucha sed, así que bebí un poco de ese agua. Entonces todo cambió: el brazo puede mover.

-¡Y por eso por lo que estás tan bien!

-¡Claro! Por eso voy todas las mañanas a la fuente, para beber de esa agua tan maravillosa.

-Pero… ¿de dónde vendrá ese agua?

-¡Podríamos ir hoy siguiendo el camino de la fuente!

-Pero tenemos que tener cuidado. Seguro que la fuente viene de la montaña.

-Pués venga. Vamos a vestirnos y a desayunar cuanto antes. ¡Tengo unas ganas de ir!

Lidia y Blanca salían andando ligeramente del pueblo. En menos de una hora, Lidia divisó a lo lejos una pequeña cinta de plata y una fuente. Madre e hija fueron rapidamente hasta la fuente. Allí se refrescaron los brazos, la cabeza, lacara, los hombros… Al fin, a Blanca no le dolía nada el brazo y podía moverlo perfectamente y a Lidia se le quitaron las malditas contracturas que tenía en el trapecio.

Las dos “mujeres” siguieron el camino. El campo estaba precioso. Se (vehía) veía a lo lejos unas casitas muy bonitas. El río tenía por todos lados alrededor unos inmensos campos de flores multicolores. Era más bien un pequeño arroyo. Cuando era la hora de comer, se sentaron entre las flores y degustaron los exquisitos bocadillos de manteca de coliflor que Lidia había preparado. Cuando terminaron, siguieron el camino. Ya en la hora de la siesta, habían llegado a la falda de la montaña. El arroyuelo se iba extrechando. Siguieron al “río” hasta que… ¡entraron en una especie de abujero donde estaba todo lleno de grandes casas coronadas con un escudo!

Las dos extrañadas llamaron a una de las casas, y, ¡apareció una bruja! Les explicó que la fuente atraía a las brujas, y que ellas eran una de ellas, es decir, Lidia y Blanca, las 2 aldeanas más pobres, fueron brujas, tuvieron poderes, etc. Y así se explicó que no solo los afortunados tienen suerte.

*

[Descripción científica de la Granja-escuela “el Acebo”.]

A llegar, se ve claramente na gran casa de madera con tres pisos. La puerta principal es grande, negra y de hierro, y las ventanas no muy grandes. Cerca de esta – al fondo- hay un pequeño parking con unas diez plazas. Por la otra parte, hay un patio exterior pegado a la puerta trasera. Una escalera de cemento baja hasta llegar a un gran patio donde hay dos casas que utilizan como talleres. A la derecha, hay un corral con gallinas, patios, ocas, etc. Abajo, está el huerto, y a la derecha de este, están las, vacas, ovejas, cabras. Etc-

[Descripción literaria de la Granja-escuela “el Acebo”.]

Al entrar en la casa principal, se podía notar el olorcillo a comida. Todo lo recuerdo: las habitaciones eran cálidas, pero bonitas y alegres. El comedor era grande y estaba bien decorado, y hacía algo de calor. Siempre que entrábamos allí me daba la sensación de que ibamos a comer o a hacer algo divertido. El paisaje que se podía contemplar desde allí eran unos hanchos montículos con poca vegetación, reflejados por la poca luz que daba el sol allí. Todo eso me daba una sensación de bienestar y felicidad, pero sobre todo notaba que esos cinco días me los iba a pasar estupendamente.

 

2002-3

Leo

¿La balanza del deseo amoroso tóxico entre dos? Unx se apropia del misterio de lx otrx y, mostrando esa apropiación, atrae hechizando. Se ha ido el chico músico free spirit cuya sonrisa me recordaba a Andrés y vuelve a haber ruido: el ruido de la ansiedad eufórica (todxs maniacxs). Isshan ve vídeos de autoayuda – digo, de lecciones de guitarra-, y Leo repite melodías tristonas persiguiendo una pasión que se le escapa. Carmen hiberna y reposa para que su cuerpo no se quede atascado. Y yo me aburro. Hay un ventilador en el techo algo descolgado que hace un ruido peculiar, como de un colchón con muelles.

“¡Yo también pensaba que era imposible! Sigue trabajando. Rock it!” No te pares ni un poquito. Sigue perfeccionando tu evidente imperfección. ¿Que no funciona? Quedan los esqueletos: repite, aisladx; performa la metáfora del encuentro con el cuerpo que nos libera de la ansiedad: la repetición (respiración) de sonidos (vida) que termina por aportar fluidez musical (felicidad). Nos la cuelan por todos lados. “¿Cómo se alimenta al monstruo del vacío? Por error, supongo.”

Cómo explicarle a alguien sin enfadarle por la invasión: convirtiéndote en receptorx de lucidez que se transmite por teatros. No debería ser una opción en tu test para encontrar a tu yo perfectx; la opción, quiero decir. Últimamente, he podido pensar: no colaboro en sus ansiosas cegueras con el tabú (sin traerlo al flujo meta de lx otrx) puesto que desde adentro el tabú está vacío y desde fuera es solo una categoría para paliar el desgarro. Cuántas somos enganchadxs a los canutos (y/o a la virtualidad, y a tantas cosas). Al final es lo único que permanece: desde el principio hasta el fin, el humo de un proyecto metonímico de lo colectivo que se esfuma.

If you do so do I.”

A menos que coincida tu vida con cierta película, el amor estará eternamente despoblado de lugares comunes. Diciéndote “puedo soportarlo” (¿porque merece la pena?) dices en realidad: “elijo esta escena para que se oficialice”, porque anhelo el aura del amor de X, esa conexión que parece no agotarse en la niebla viscosa de este siglo. Lo reconozco: eso no es mío y nunca lo será. De hecho, lo detesto – o al menos como institución, como ejemplo de ley, como trampa, como bucle, como hechizo maldito, como abandono, como sufrimiento, como agarre sumiso -. En realidad siempre fue un enemigo… si es que siempre hay una guerra. Qué locura. Que con todo esto el canal-filtro de deseo erótico/voluntad excitante/potencia planificadora esté abierto. Este “tipo” de *amor* es una llave a una dimensión esquizofrénica. ¿Hay amantes que dicen amarse? ¿Que se dan cuenta? ¿Que no se matan o se encierran? ¿Lxs hay? ¿Que se juntan para luchar y divertirse? Por la Gran Cachondea que lxs haya. Espero que sí.

La desmotivación es psicótica. La motivación en cadena directamente es psicópata. Me gusta el calor de los cuerpos. Y volar en el atardecer del mar. Yo decía en ansiedad eufórica: quiero la dosis completa de cada detalle de este tiempo-espacio para que me arrolle como una ola el temor a la lucidez (acidez de luz).

/ en reminiscencias de niebla bucle mente vincula la ansiedad a sucesos tiempo real descuidar porque eres vidente /

¡Imagíname en un museo! Imagíname ahora como el mapa de un museo desde el cielo. ¿Bien? Buen trabajo.

***

La imagen: un campo cercado con forma ovaloide, como una cabeza alargada. Crece una maleza grisácea que pincha y no tiene frutos; su reproducción se maquinizó a través de una inyección así que crece y crece y crece. Le inyectan *SÍ* a la melaza para que crezca, pero tampoco hay malezas como rascacielos (rascacielos de maleza) porque cada jugadorx va sobre una balsita de tamaño obligatoriamente variable que engulle ante el contacto la maleza que crece.

Todo lleno de maleza que crece y de jugadores que se trasladan saltando y comiendo o haciendo desaparecer dependiendo del apetito la melaza, que de otra manera (importante) quema, pincha, envenena… de todo. También pueden desplazarse horizontalmente si sus balsas se lo permiten. Objetivos: jugador – expandir el tamaño de su balsa (mil teorías de cómo pero nadie segurx); equipo – engullir todas las malezas a la vez para verse.

El juego no termina nunca. Es complicado verse entre tanta maleza.

 

(Rabat, 2015)

Demonios de niebla

*

La ausencia paranoica: hostilidad egocéntrica revestida de pacífico-empática. La hostilidad: signos aprehendidos al esconder el grito, la lágrima que brotará para que el mar se filtre por los ojos y lave todos los puntos de mierda que se han quedado grabados en nuestras pupilas.

*

Siento que me tienes algo de miedo y en estas ocasiones soy una puñetera antena parabólica del miedo, soy el miedo, el pelo negro de la canción. Y vengo a arrancarte la palidez dental. El juego de mesa más antiguo es el pronombre “mi”. No puedo evitar sentirme… invisibilizade por un discurso articulado por el conocimiento; y es una perla enorme y brillante, me desgarra porque me deshice de ella y la tiré a la lava; y la recupero para colocármela en la frente y volar con mi velero y mis viejxs amigxs, pero a veces me quema y me asusta tanto…

*

Jugar con la realidad es de hecho lo menos automático. Déjala desvelarse con tu respiración, con calma. Nunca se ha ido. Tus viajes racionales y analíticos esconden tus percepciones; encuentran las suyas pero vapuleando a las demás. Da paso a que se junten y se reencuentren, a que se fundan sin piedad, pues en esto está la vida y qué si no vivirla. Sumergirse es casi automático y crea puentes para protegerme o atacar; viejo Dani con casco, chiquillo de Oshima que agita histérico la pistola.

*

Sedúcete por tu carne y acaricia tu piel templada. Nadie de por sí puede entenderlo. Déjales pasar. Pregúntate: ¿para qué? No lo esperes. Decide, si dudas, dejar de dudar. Saca la cámara de paseo, erguida, lentamente. No abandones el recuerdo de la sensación de que todo está bien. Está ya ahí y tú solo puedes integrarlo en ti para enfrentarte, divertirte, sentir, pensar. Ignora a los jueces, a las voces revestidas de amistosas; es la norma interna retorciéndote el corazón. Que nadie se atreva a retorcerte el corazón.

*

Tantos años olvidando una razón fácil: vivir por lo bello, por la diversión, por el amor. Nos han robado el tiempo y tú con potentes máquinas en tu cabeza jugando a thrillers y películas de terror. Tan perdidx, tan inciertx. Que esta realidad se colorea como quieras.

A ponerse fuerte para derrotar a las máquinas de la dominación  y a sus aliados.

Para vivir. Para crear.

Que no se te olvide, que no se te olvide, que no se te olvide.

Recuerda.

No es que puedas, es que eres.

Que no es justo que tengamos que morir de pena.

*

Arrastras el castigo por sumergirte. Bañarse en la hiperrealidad es como bañarse en cloro. ¿Dónde la ducha que lo limpie? Si sale agua también con cloro. El centro se encuentra al no buscar. La búsqueda es la tarea que te mandas por no saberte la lección. Por eso usas a lxs demás como centros temporales e hipotéticos de referencia. No estás incomplete porque no te esté sucediendo un gran amor. Tu sacrificio es devorar el tufillo de realidad de la estufa cis-heteronormativa. No dejas de ser siempre lo que quieres.

*

Toda sensación de necesidad es metáfora del aire que respiras. Convertirlo en metonimia es jugar al autoengaño, y qué tristeza es aquella que no se puede llorar…

Si enloqueces, cúrate. Busca el lugar: tienes energía para ello y sabes cómo hacerlo. Agradece el existir y el vivir tu vida. Deslízate con el calor. Rechaza crearte a través de comparaciones. Ayuda al mundo a curarse. Al sanar, luchamos sin esfuerzo salvo en la urgencia, cuando también puede ser un juego. Las pesadillas al despertar son carne de Resilencia. Que no te asusten los códigos colectivos, la sensación de que nos adulamos cuando nos compartimos sin máscaras, a sorpresa de lo verdadero. Vincúlate a la vida.

(2014)

*

La verdad: Simulación de un paraíso mitificado (el mundo sin control, el amor libre). La verdad es todo lo que se cuela por el filtro del control, lo que no engulle. Los fallos del sistema son su huella (o su registro). Hay una verdad oculta que no es transparente: la que explosiona y atenta contra el filtro aunque sea finalmente neutralizada por cualquier imagen-simulacro.

El simulacro: Niebla espesa de la mente intersubjetiva en este tiempo. Se libera de forma aleatoria y caótica (es un sistema productivo de confusión; como la confusión de las carreteras y los coches para los peatones). Todo pasa a toda velocidad por todas partes en la era de la información. Cualquier discurso potencialmente hegemónico puede ser adoptado mediante su propaganda como fuente de revelación metafísica. Incluso la idea de que la lucidez del despertar en el todo es solo una idea más.

Ese es el poder del simulacro. Convertir la verdad en su imposibilidad, el pastiche de su presencia, en desplazamiento, negación o ausencia. Para simular que la realidad siempre fue como señalan las imágenes codificadas y predispuestas a reproducirse en cada minúscula partícula de la niebla del simulacro. Para simular lo que sea para permanecer. “La cuenta atrás de la autodestrucción del mundo”.

Formas de disipar la niebla: Las imágenes del simulacro son adaptaciones culturales y se materializan en juegos sociales (las colas, las idas y venidas, el visionado solitario o colectivo de pantallas, la interacción cibernética, la conquista amorosa, la ambición laboral, el ego delx artista); y en instituciones (las escuelas que se adornan con colores para atraer a los niños, los hospitales con su atmósfera enfermiza, la constante degradación y humillación que supone acatar una orden ajena, la burocracia). Los juegos del lenguaje o los grados del conocimiento lo replican todo a través de la materia del simulacro (edificios, calles, cuerpos y espacios envueltos y maquinizados, códigos diegéticos). El control realiza un constante registro sistemático que se reinicia en cada producción de imágenes.

La vista debe asumir el simulacro de su intuición y performarse predestinada. Con la ansiedad, la vista no se posa (no se ve nada salvo la proyección del viaje psicótico de la mente).

El aire en las ciudades está contaminado y no se respira bien. Parece que no es suficiente. Huele como debería de oler la muerte de la muerte. La respiración debe asumir el simulacro de su intuición y someterse, como la imaginación, a la lógica del control.

En la dimensión de la mente lo que ocurre es la imaginación. El control educa a ciertas voces para que representen y reproduzcan al control. Al final todas las voces aprendieron juntas. Las voces de las imágenes y las imágenes de las voces sostienen y rodean a, se sobresalen, se extraen de la imaginación, cuya intuición es la magia (belleza, telepatía, amor, totalidad), y no simular estatismo. O un sujeto. O un objeto.

Formas de disipar la niebla: Volver a ver (tercer ojo, realidades no psicóticas), volver a respirar (sin arritmias ni taquicardias, pausadamente, destensando el abdomen, el pecho, la garganta y el resto del el cuerpo).

Los juegos y rituales que se performan en estos dos procesos disipan la niebla, que vuelve sin avisar y que tiene un curioso efecto: con ella todo se olvida, sin ella apenas se recuerda. ¿Quién quiere recordar? ¿Quién se puede permitir no olvidar?

El cuerpo se vuelve cuerpo (el biotecknonecromierdix-poder ya no lo controla ni registra, no podrá preverlo y usar su posibilidad de liberación para perfeccionar su control).

Nombres de los simulacros de las formas de disipar la niebla (si no otro gallo cantaría). De rever: descansar, un break, meditar, irse de vacaciones, inicio, final, fiesta.

De respirar: encontrar la pasión, sé tu misma o al menos relájate, auto-contratos que permiten liberar tensión con amnistías y objetivos, protocolos de cuidado.

Cada persona tiene una experiencia única con la niebla. ¿Quieres hablar de ello como una conspiración, un aviso, una alerta, una profecía, un tema de conversación? (…)

(2015)

Ex-tratos de “Fotolog 2010”

Enero

1

Me duelen tanto algunas partes del cuerpo. Esta mañana ha sido como renacer. De repente, abro los ojos y me encuentro en MI cama. No tengo ningún recuerdo de desvestirme y meterme en ella, así que me ha sorprendido. Por costumbre, me he metido un dedo en el ojo pensando que me había acostado con lentillas. Tras varios intentos (ahora también me duelen los ojos, claro) he ido al baño y -después de continuar intentándolo, por cierto- me he dado cuenta de que ¡oh!, me las había quitado. Bien, bien. He vuelto con los dos sombreros, con los zapatos. Sin tabaco y sin pipa. Creo que me compraré una negra y marrón clásica, aunque esta otra me gustaba. Bien, bien. Podría haber sido peor.

Ayer me lo pasé bien. Fue una fiesta muy familiar y estuve tan agusto con la música. Ay, joder, esto no me gusta. Ayer por la noche me sentía un extranjero. 23:00, esperando ESPERANDO unas putas campanadas. Por primera vez en mi vida no me parecía mágico, ni siquiera me ponía nervioso. Pero a la 11a campanada sentí un pinchazo. Adiós, 2009. Lo dije. Ahora tengo que estudiar. Hace un año -el día 2- actualizaba con una canciónpoema de Morrison y comentaba (no el 1, extraño) mi situación monografía- soloencasa. Es todo tan parecido. Decía unos días después:

“Me preocupa una adicción, una falta de tiempo futura, una falta de SER y que te mueras. Eso de aquí a mayo.”

La adicción maduró, el tiempo faltó, conseguí SER y Pizca acabó muriéndose al día siguiente. Ahora no me preocupa prácticamente nada. Ni siquiera me estreso pensando en lo que tengo que estudiar. En fin, sólo quiero organizarme económicamente y planear más viajes. Me he dado cuenta de que los viajes, más que casi ninguna otra cosa, me alegran. Mucho. No quiero parar y no voy a hacerlo. Ay, no hay planes para este año. Las cosas que terminaron lo hicieron ya. Que acabe no significa nada.

Me estoy cansando. Me queda poco para terminarme El Hobbit y llevo sin comer 24 horas. En plan serio, claro xD.

2

Creo que hay un factor importante que suele pasar desapercibido: la película es, sobre todo, la muerte del personaje como tal y su superación. Sí, precioso es ver cómo Amélie construye un mundo imaginario con detalles mágicos y atractivos, pero no es que así llega a ser feliz. Es algo que queda claro. Al final, esa chica solitaria y fuera de lugar en El almuerzo de los remeros salta y conoce al chico del que está idealmente enamorada; destruyendo así, pues, la posibilidad de continuar su eterno sueño insatisfactorio. Las personas especiales deben construír magia a su alrededor; pero su vida no es esta magia: ¡ellos lo son! Las historias deseadas acaban con la especialidad, puesto que tienden a consumir a la persona que las alimenta. Impedir relaciones que podrían existir no es de alguien tímido, es de alguien cobarde. No es de alguien especial e interesante, joder, es producto de una incapacidad preocupante por intentar ser feliz. Yo voy dejando poco a poco ATRÁS los 16 años. Conocer lo nuevo aporta la magia más fuerte que pueda uno imaginar. No os cerréis, Amélies, porque acabaréis muriendo entre recuerdos de cosas que nunca fueron. Y sí, los tiempos siempre serán difíciles para los soñadores. [Coolcucumber el 03/01/2010: Estoy de acuerdo contigo, eso es de cobardes. Pero, joder, los cambios no son tan faciles para una persona que lo ve todo tan lejos. Y de ahi los sueños y la desesperacion por no vivir en mayusculas, el unico impedimento para todo es la persona misma.Hacia muuucho que no abrias los comentarios. ñañaññaññañaañañaña jo.]

4

Hoy he soñado que me iba andando lejos, creo que a Rusia o a Sudamérica, con vosotras dos. A veces aparecía también Inma, y hasta Mariluz.

5

Hoy he soñado algo terrible. Nunca recuerdo haberlo pasado tan mal en estado onírico (que no en vigilia, claro). Ha sido traumático. Todavía ahora, cuatro horas más tarde, me cuesta concentrarme y reaccionar. Lo apunté todo en un papel.

A las 9 de la mañana despierto. Salgo del sueño. Era como si realmente volviera a esta realidad, puesto que salí respirando rápidamente y gruñendo y me encontré en mi cama haciendo lo mismo. Todo por Theodore. En fin, enciendo la luz, me enderezo, intento tranquilizarme. No me podía imaginar cómo diablos había soñado algo así. Y es que aquí, ahora, sonará totalmente frívolo y hasta infantil. Pero de verdad, lo que yo sentí supera todo eso.

Para empezar, realizaba un viaje con mis padres y un grupo de gente por el norte de África. Nos asentamos en un gran caserón semi-abandonado. En una habitación había un agujero cuadrado. Por la noche, la gente comenzó a caer en ese agujero. Algunos se acercaban y se resbalaban; otros, bailando o cantando, no podían evitar aproximarse lo suficiente como para ser absorbidos por la oscuridad. Parecía que nadie se daba cuenta, o al menos, se preocupaba; incluídos mis padres. Salvo yo. Intenté ayudar a tres personas con cuerdas: los tres cayeron. Cargué con esa culpabilidad. Por alguna razón, está escrito “desconfianza de mi hermana”.

Tiempo después, me reuní con un grupo de gente (entre los que se encontraban personas de mi clase del BI, lo que no es raro puesto que ayer hubo cena con ellos). Sentía cierta sensación de peligro. La casa a la que fuimos esa noche también tenía signos de abandono. La gran sala tenía forma de circunferencia. En el centro, había un gran agujero. Encima de él, una cuerda. De nuevo, esa noche la gente comenzó a bailar, cantar y reír. Algunos intentaron trepar por la cuerda hasta arriba para balancearse. Empezaron a caer. Sólo unos pocos nos dábamos cuenta de la gravedad del asunto. Otras tres personas cayeron, intentando yo salvarlas. Tenía algún vínculo sentimental con ellas. A la hora de la partida, comencé a llorar como un loco y a culpabilizarme por todos ellos. Patricia y alguien más me aconsejaron que no servía para nada. Toda la gente se preparaba para marchar como si en la noche anterior no hubiera muerto nadie. Me sentía incomprendido y fuera de lugar. Todavía tengo un nudo en la garganta.

Luego hay una tercera escena. Ocurre en la casa -imaginaria- de un amigo de mis padres. Al parecer, había desarrollado yo un miedo increíble a las alturas. La casa de este hombre era enorme y de mármol. Recuerdo un desayuno: estaba asustado porque el suelo resbalaba y era fácil caer al vestíbulo desde el comedor. Mis padres se burlaron. De repente, vi algo que me llamó la atención debajo de las enormes y altas escaleras que subían del vestíbulo al comedor. No puedo recordar con precisión qué era, pero lo relacioné inmediatamente con los agujeros. Fui allí como pude y me encontré con una mujer alta, de pelo negro, y aparentemente ciega. Supe entonces que ella era la culpable de todo, quien había atraído a la gente a los agujeros. Se llamaba Theodore. La culpé y se rió; seguí culpándola. Estaba lleno de furia. Comenzé a resoplar y a gruñir. Cuando estás durmiendo, expresar sentimientos (llorar, gritar de miedo, reír de alegría) se convierte en la misión de un moribundo. Si te observan desde fuera, sólo estás haciendo pequeños ruidos. Yo desde dentro estaba estallando. Me he despertado gruñendo. Gruñendo y muerto de miedo. En fin, hacía años que no necesitaba encender una luz durante unos minutos.

Luego soñé que estaba en una guerra de algún país árabe. Cuando me levantaba eran las 18:00 y había una enorme tormenta. Los rayos caían en el para-rayos de mi edificio y el agua se filtraba por la doble ventana. Intenté arreglarlo y se desencajó aún más. En fin, me ha costado aceptar que sólo era la una.

No sé por qué me ha ocurrido, pero estoy enfadado y preocupado. Pensé inmediatamente en mandarte un mensaje. No, a ti no, joder. Para qué. Supongo que la otra persona ya no tiene el móvil encendido por las noches.

7

Está nevando; nevando, lloviendo, nevando. He soñado contigo. Justo hoy, esta noche. Estabas igual que cuando me despedí de ti. No te has ido. Estás todos los dias, en cualquier parte.

7 de enero. Hace un año fue el día más triste y bonito. Hoy nieva por ti, por tu sonrisa perpetua y tu mirada de magia. Por ti.

9

Me he quitado un peso de encima de trece meses. O eso espero. Ayer vi una obra de teatro que me gustó y no estoy enfermo. Vuelvo a beber leche. Hoy me afeitaré. Estoy comiendo cereales y ¡oh!, esta noche celebramos invisiblefriend entre 0509.

Me apetece montar a caballo en un desierto y pasear por un bosque abrigado. Yo, no el bosque. Pero no con este frio. Con otro. Como en el Bosque Cerrado. O andar por la calle de una ciudad vieja y ver carteles de cosas que ocurrieron, de estos que están roídos. Bruselas era un poco así.

13

Me gusta demasiado este tiempo como para verlo desde aquí, tan dentro de lo mío y él tan fuera, como un compañero lejano.

Estudio y le veo tras la ventana, y me encantaría correr un poco por la calle y fundirme con tanto blanco de cielo o fumar y echar mi humo a la noche. Estoy comiendo (comiendo, sí) Cola-Cao al modo Inma y me he comprado una bata bonita. También engullo bombones y pienso en regaideas. Jjjjjjji. Nunca pensé que Derrida y Foucault serían tan útiles. Toda mi vida escuchando a ancianos zarandear como hechiceros al relativismo, bien defendido por ésos y siempre respetando a Nieztsche. Bueno, aquí tengo a mis ésos. Creo que ver su rollo postmo como algo negativo es limitante y también tu puta falta de abstracción. Aprovecha los treces para los rituales; los miércoles son igual de negros por la noche que los viernes.

*

Estoy cansado de tanto emotional rollercoaster. Pero es tan curioso. Hace dos horas quería pasar con mi cama toda la tarde y ahora estoy hiperactivo.

*

No nos sentimos de la misma especie porque creo que no somos capaces de entenderlo. ¡Framing! Bueno, resulta que necesitamos ver cifras para hacernos una idea, y ni aun así. Yo no puedo imaginarme a un millón de personas; lo máximo ha sido la batalla de Minas Tirith en El Retorno del Rey. Somos tan limitados a nuestra esfera. Si viajamos al epicentro de la desgracia conoceremos, sólamente, esa desgracia. Entre tantas y tantas. Por eso buscar el amor, aquí y ahora. Es tan necesario. Si no nos volveríamos locos.

A propósito de desequilibrios: Tolkien me sorprende cada vez más. Para empezar, la aparición de Glorfindel es curiosa. Es bastante probable que coincida con el mismo que luchó contra el Balrog en Cirith Thoronath, permitiendo a Tuor e Idril huir de las ruinas de Gondolin. Aparece de nuevo en Imladris; junto con Elrond, el Medio-Elfo. Bueno: el vínculo es innegable. Es nieto de Idril y bisnieto de Turgon, es decir, su heredero directo. Es bonito pensar que los Elfos disponen de esa gracia. Y a propósito del rey de los Noldor en la Tierra Media, ¿Galadriel o Elrond? Porque a Galadriel se la trata como a una Avari (siendo la única hija de Finarfin, señor supremo de los Noldor, viva; la más anciana de la Tierra Media junto con Círdan el carpintero de barcos, quizá su tío segundo). Por Dios, Lúthien riéndose de Sauron y Melkor, y Gandalf temiendo a los Nueve. No es serio. Por muy limitado que esté. En fin, Tolkien me sorprende.

Llevan al hombre rodando loma arriba y lo arrojan a la luna, mientras que los caballos galopan de espaldas y la vaca cabriola como un ciervo la fuente se va con la cuchara.

Es una canción de Bilbo que Frodo canta en el Poney Pisador. Todas las estrofas son prácticamente equivalentes en lo que se refiere al grado de surrealismo. Me encanta, me encanta. Continúo estudiando. Quiero emborracharme.

*

Quiero verano. Sentir el verano. En Ibiza, especialmente, era estar dentro del verano. CALOR. Veinticuatro horas del día. Hasta al salir de la ducha el agua se confundía con sudor. Pero al cabo de un par de días te acostumbras, aunque sigue sorprendiéndote cómo las putas inglesas son capaces de pintarrujearse tanto la cara. El maquillaje debería de evaporarse.

Tengo ganas. Estos días, ESTE DÍA, me aviva tanto. Ver el cielo BLANCO. BLANCO. Con alguna que otra línea azul. El cielo azul es agobiante. El cielo blanco está lleno de texturas.

Cinco días para terminar y empezar.

*

Hoy tengo sueño. Bueno: no he hecho nada. Salvo dormir poco y un examen (y ocio, y ocio). La cosa es que necesito dormir ya. No entiendo a Aragorn: apenas duerme. Durante los veinticinco o treinta días que tardaron los cuatro hobbits y el Montaraz en llegar a Rivendel, éste se queda despierto numerosas noches. Y también cuando la Compañía está completa y se disponen a entrar en Moria. ¿Y cuando Gimli, Legolas y él persiguen a los orcos que raptaron a Merry y Pippin? Ay, quiero llegar ahí. A ver cuánto tarda el hombre sin dormir. Qué envidia. Me siento como un hobbit gordo y vago. Yo necesitaría mis ocho horas diarias: porque podría estar despierto y con energía, pero en un estado de mal humor bastante insoportable y sensorialmente alterado. Ya he estado ocho días durmiendo una hora diaria y me sentía como un animal; escuchando sonidos extraños y viendo colores en zonas lisas.

Vale: quiero ir a esa playa. Tú me entiendes. Luego, cualquier cosa. Necesito llamarte (a ti, foto) e ilustrarte. Puede que te parezca bien.

Me encanta estar en mi cama y ver a Sara y hablar; que pasen dos horas y que apenas lo note.

Quiero cambios y vitalismo. En fin, lo tengo. Lo estoy teniendo. Los siento entre mis manos de pensamiento y los estrujo y quiero que me lancen hacia el futuro. Bueno, allá voy.

*

Resulta que he vuelto a soñar una tontería de estas que me hacen pasarlo mal. En fin, no ha sido grave; simplemente angustioso. Al levantarme apenas sentía nada salvo enfado por mi puto subconsciente.

Bea nos había invitado a pasar unos días a casa de su tía a saber en dónde. Íbamos a ir el grupo reducido de X-BI, sin contratiempos ni sorpresas. Recuerdo que me levanté muy temprano y con ilusión. Pero en Barajas, me encontré con medio BI y fantasmasdelpasado que estaban ahí porque PRETENDÍAN venirse también. Por supuesto, Bea no los había invitado. Sentía que estaban ahí para molestarme a mí. Dios, iban a viajar a la casa de dos habitaciones de Bea. No tenía sentido. Me puse a gritar a todo el mundo como un loco (eran como treinta personas) y hasta decidí que ni dios iba a viajar (era el único que sabía la dirección xD). Apareció Alejandro-amistoso para saludarme y le mandé a tomar por culo. Se puso a llorar en unas escaleras pero me daba igual; estaban ahí para MOLESTARME. Odio a la gente imprudente que no se da cuenta de que molesta en ciertas ocasiones, joder. Demuestran sus pocas luces, su falta de empatía. Como si hubieran cerrado la capacidad de percepción del mundo exterior cuando cumplieron los cinco años.

Vale: me aburre mucho Economía. No soy capaz de querer entenderlo y mi silla es una mierda. He dormido con montones de ropa tendida y huelo a suavizante. Me duele la cabeza. El agua evaporada se ha llevado mi calor interno.

Luego soñé que estábamos en Madrid-desertificado y que venían SaraCrisMaría a vernos. Laura se quedaba un rato hablando con ellas.

*

Voy a estallar. Me siento igual que un viernes a las… nueve de la noche. Sí. Un viernes después de seis horas de cama, cinco de clase y tres de transporte. Mi cabeza, cansada; y mis ojos cerrándose poco a poco. La cafeína no me hace una mierda. En serio. Creo que las sustancias estimulantes me tranquilizan. Al menos las legales.

Pero estoy contento. Voy a salir un miércoles. La última vez que salí un miércoles en horario escolar era mi cumpleaños. Creo que cumplía 15 ó 16. Me fui con mi hermana, una amiga suya, María y Cris a una tetería. Probé mi primera cachimba y me sentí adolescente. Me gustó esa noche.

Según Galadriel, “[…] se dice del Señor de los Galadrim [su marido, Celeborn] que es el más sabio de los Elfos de la Tierra Media.”, afirmación que puesta en boca de esta mujer me hace replantearme ciertas cosas. Que se sepa, de los Teleri -Nandor y Laiquendi, habitantes de Beleriand o los que se quedaron al este de las Montañas Nubladas, lo que los une directamente con los Elfos del Bosque Negro y los Galadrim de Lórien-, y sobre todo, de este grupo, los Sindar de Beleriand y del reino de Doriath, sólo Círdan el carpintero de barcos y Celeborn, entre los grandes señores, siguen con vida (lo que supone que también su séquito más cercano). De Celeborn se dice en El Silmarillion repetidas veces que es pariente del rey Thingol, y hasta príncipe de Doriath, por lo que podría pasar por primo. “[…]ha residido en el Oeste desde los tiempos del alba.” Si con alba Galadriel se refiere al sol (el Espíritu de Fuego Arien), producto del Daño de Melkor y Ungoliant al destruir los Árboles, Celeborn es incluso más pequeño que su mujer y, por supuesto, menor que Círdan. Si suponemos que se refiere al despertar de los Primeros Nacidos en Cuiviénen, de otra cosa estamos hablando. Celeborn sería, quizá, el único verdaderamente primer nacido de la Tierra Media, dando por echo que los Avari fueron asesinados o raptados en su totalidad. Otorgar a un Moriquendi el más alto grado de sabiduría, es dar por hecho que la de Elrond (bastante joven en comparación con los anteriormente nombrados) es inferior; se entendería la temerosidad de Galadriel como un acto de auto-reconocimiento de su superioridad tan evidente. Bueno, puede que discrepe. Las intervenciones de Celeborn ante la Compañía no me gustan, aunque quizá esa hostilidad hacia Gimli es lógica (los enanos mataron con absoluta crueldad a Thingol), pero guardar resentimiento es poco prudente.

Aun así, es gracioso ver cómo un Moriquendi se nivela a los Laiquendi; estaba ya harto de que los elfos de la oscuridad estuvieran tan mal vistos. En realidad, me parecen los elfos más pacíficos: los graciosos y livianos elfos verdes de Ossiriand o los tranquilos elfos de Lórien contrastan demasiado con la agresividad de los Noldor (los hijos de Fëanor asesinaron a los niños de Dior), aunque no con el temple de los Vanyar y los Teleri de Tol Erëssea. En cuanto a la sabiduría, elegancia y grandeza, ya sí que no hay comparaciones. Por lo tanto, los Noldor constituyen realmente la diferenciación entre los primeros nacidos. Creo que por eso me gustan más.

Debe ser curioso y bonito ver cómo Elrond trata a la abuela de su esposa, Galadriel; y aun así, pariente lejano (y único) al Este del mundo. Y cómo su hija, Arwen, se parece tanto a Lúthien; seguramente amiga de Galadriel cuando todavía moraba en Menegroch y bisabuela del Medio-Elfo. Me gusta pensarlo.

Ay. Creo que nadie (salvo Carlota, si se digna a leer todo esto xD) ha entendido nada.

22

Felicidades.

Aunque el 19 sea un número horrible. Teóricamente, tendría que corresponder a la mejor época: universidad, fin de la adolescencia y comienzo de la juventud. Tienes un año para concienciarte de que los 20 están a doce meses; los 20, con las cargas que supone y la liberación. Porque los 20 son liberación. Como si te dieran un billete para viajar a miles de situaciones que antes ni habías concebido. Digamos que los 19 son la etapa preliminar. Además, ya han ocurrido cosas que pasarán a la historia de tu vida. Podrás contar a tus nietos que empezaste Derecho y, en un ataque de locura, dejaste la carrera para comenzar Filosofía. Es una buena anécdota. También que suspendiste todos los exámenes de un curso. Tus nietos mirarán a su venerable y bonachona abuela con acento gallego que se mece en la hamaca mientras les hace una bufanda y lee algunos pasajes de Ciorán y no podrán creérselo. En fin, pensar en este tipo de cosas queda totalmente fuera de la agenda 19. Y también si dejaremos de cantar Forever Young a los 35 ó a los 40. Por ahora, lo cantaremos siempre.

Piensa en lo que tienes, quieres y tendrás. Las cosas son o no son, y creo que ahora mismo hay y mucho. Te lo has ganado, y aun así te mereces más.

*

Eran las 6 ó 7. No recuerdo cuándo cerraba el Magnet; creo que las 7:30. Amanecía tan temprano que andaba descolocado todo el día. Resulta que antes estuve en esos sofás rojos y viejos que estaban en las paredes. La gente se sentaba para hacer el gilipollas pero yo me senté porque no podía estar de pie. Me dediqué a observar la sala durante un par de horas. No podía hacer otra cosa. Recuerdo incisos de gente hablándome, hasta una conversación-back con un estudiante de restauración (¿de muebles?) en Frankfurt. Creo. Luego se fue vaciando y viniste tú con el pobre chileno. No sé cómo se dio por satisfecho cuando le expliqué la forma de volver al albergue. Luego al llegar nadie le había visto. ¿Perdió al final el avión? En fin. Viniste tú y me hiciste despertar en un momento para aparentar que estaba triste o yo qué sé. Te dije algo de Ole-hulo y pusiste cara de solterona, esa que tanto haces de vez en cuando. Como si cantaras ópera. Pedí un vaso de agua y la camarera me dio una botella. Estaba volviendo a pensar y el puto síntome post-depresivo se iba. Entonces pedí Creep y fue algo necesario. Tan oportuno. Luego salimos, con esa luz que parecía de mediodía y las calles ocupadas de piares de pájaros y ausencia de humanos. Creo que empezó a llover. Somos tan dramáticos. Pusimos nuestra sonrisa resignada (yo, forward; tú, O.) y comenzamos a andar. Luego vimos a Laura tumbada al revés en un banco y todo cobró sentido.

Odio que el día se vaya ahí fuera. Me dan ganas de gritar por la ventana ESPÉRAME y salir corriendo para al menos sentir algún rayo de sol. antes de que se esparzan por todo esto.

*

Poco nuevo se puede decir del famoso síndrome de Clerambault, la erotomanía, la obsesión de las obsesiones. Descrita ya anteriormente por estudiosos durante la larga trayectoria temporal de occidente como Hipócrates, Ferrand o Esquirol. Este último diferenciaba la erotomanía de la ninfomanía a principios del siglo XIX con los siguientes términos: En la segunda el mal se ubica en los órganos de la reproducción, cuya irritación hace reaccionar el cerebro. En la erotomanía, el sentimiento que la caracteriza está en la mente¡Los que padecen erotomanía nunca atraviesan los límites de la adecuación, permanecen castos!. El síndrome puede estar acompañado por esquizofrenia paranoide; aunque su forma primaria, sorprendentemente, sólo supone un grado de delirio. El sujeto está absolutamente seguro de que ama al y es correspondido por el objeto, de una posición social (de estatus, económica o intelectual) normalmente superior. Esto es efecto de supuestas señales o coincidencias que el sujeto interpreta como impetuosos símbolos de amor. El rechazo es la confirmación de la correspondencia. El primer caso de estudio de Clerambault fue, precisamente, una modista francesa que estaba enamorada del rey Jorge V de Inglaterra. Realizaba frecuentes visitas a Londres y se apostaba en frente del palacio de Buckingham. Según ella, el rey le transmitía su amor por medio de las cortinas y otras señales. Todo el mundo sabía de la relación entre ambos. Clerambault definió el transtorno como peculiar: el sexo estaba en segundo término, casi ni se mencionaba; cuando ocurría, el sujeto hasta se ofendía.

Volviendo a las características: el sujeto intentará comunicarse con el objeto de forma gradual y poco directa. Los pacientes con este transtorno reciben psicoterapia a largo plazo y medicación psicopática. Su curación está relacionada con el desarrollo de su psicosis subyacente; ante el pesimismo de algunos psiquiatras, otros aseguran que cuatro de cada cinco consiguen -por medio de una profunda terapia- acabar con el delirio. El delirio de los narcisistas que proyectan el amor por sí mismos en los demás; que toman la esfera pseudo-radiante y fantástica de esos objetos de estatus superior y se los importan. De esta manera escapan de su insignificancia. Te quiero a ti porque a través de ti me quiero a mí, y porque sólo a través de mí tú tendrás el amor. Curioso.

Amor perdurable es una novela de Ian McEwan, escrita en 1997 y publicada por Anagrama en España. Sorprendente ver cómo el autor ahonda en aparentes trivialidades, dilemas convencionales que podrían carecer de importancia. Salvo cuando él enfoca su luz narrativa. Y todo por la imprudencia de un abuelo y su globo.

27

I like to dance all night, summons the day

But that’s how I play, yeah that’s how I play

I said who are you? Don’t matter who you are

So we dance all night and dance all day

27. Necesito encontrar una habitación en algún piso de Soho, Bloomsbury o City [?]. Estoy harto de escribir perfiles y subir fotos en páginas extrañas. Me apetece que llegue febrero, febrero libre e idealizado, ¡primer febrero sin exámenes! Quiero disfrutar del 2, fluir, respirarlo. No pensar sino limitarme a relacionar sensaciones. Como un animal. Necesito animalizarme un poquito. Lo racional, como espectador externo. También necesito sentir un fin de semana. Fin de enero, fin de semana. Enero, el mes eterno. En serio. El mes eterno casero. Como diciembre pero viejo, conservador, hogareño. Navidad tendría que haber sido en enero.

Mi cama me da miedo. Creo que, si por ella fuera, no haría otra cosa que dormir. Ayer estaba y pensé oh, podría ser. Bah.

Febrero

3

Lost. Vuelven, pero me contento con llevar tres días siendo responsable y haciendo lo que debo hacer. Me siento entre orgulloso y aburrido. En fin, estos estados suelen durar menos de una semana, así que mejor sentirme orgulloso y pensar que esto llevará a mayo. Mayo y el fin y los viajes. Porque tengo unas ganas de verano inimaginables; no por el calor insoportable de aquí, sino por la posibilidad de libertad. Me agarro a la idea de libertad (y a la opresión como fuente de mi insatisfacción) más que nunca. Algo en mi pecho se enfada, como un nenúfar de Vian; necesito poder respirar y arrancármelo. Los gritos y las prácticas de la universidad alimentan a ese nenúfar. Quiero ir a la playa y llevar tirantes sin camiseta y leer algún libro bonito. Pero estoy contento.

6

Siempre he dicho que tengo buen olfato, puesto que soy mipoe y oigo como un anciano o un extranjero. No es que oiga bajo, es que maloigo. ¡Maloigo! Esto responde a mi otra cosa escrita pero a lo cutre. Resulta que entonces queda el gusto, el olfato y el tacto. Sin duda, los tres sentidos más individuales: no se puede decir que a mí esto me sabe más que a ti, pero sí que este vino es bueno y yo lo noto y tú no. El olor es quizá más cuantificable. El tacto es mágico y solitario. Es para mí fundamental, absoluto. Me encanta tocar cosas. Cada vez que veo a una viejecita con un abrigo de piel no puedo evitar rozarlo con la mano. Me siento a veces pervertido, pero qué mas dará. El otro día una mujer-bisón llegaba un rusogorro blanco (de estos cilíndricos, con poquísima altura y anchos) tan tan suave. Sólo quería rebozar mi cara en su gorro. Lo pasé realmente mal. En fin: incomparable. Vuelvo al olfato. Siempre he creído que es mi sentido más desarrollado. Tengo una nariz grande y no sé. Me gusta oler cosas. Mi capacidad de olfato-aprehensión es prototípica. No, no prototípica. No tiene nada que ver. Es pre-real. Eso. Prototípica es primordial o algo parecido. Pero proto-ciencia es pre-científico. Bah, la cosa es que todavía no tengo un lenguaje olfativo adecuado; que todavía no tenemos, como grupo social, vamos, un lenguaje olfativo adecuado. No hay nombres para los olores salvo los más básicos. Nuestro mundo olfativo es como el mundo visual hace diez mil años. Vivimos en cuevas y cazamos mamuts olfativamente. Dudo que hayamos descubierto el fuego olfativo si quiera.

Así que, para reafirmarme y sentirme capaz, necesito un diccionario olfativo. Nombrar esto no lo valoriza, sino que lo permanece. Hay olores que entran en mí como magia, pero al no nombrarlos, y al funcionar yo como un desgraciado ser del lenguaje, no recuerdo. Se olvidan. No quiero olvidar. Luego vienen y todo revive en mí, pero, ¡sin nombre! Reviven como sensaciones efímeras, confusas, extrañas. Y no me gusta no entender. Me gusta entender y no me gusta no entender. No es lo mismo pero ahora es cierto.

Ay, estoy contento. Me gusta febrero.

12

Vuelvo a Ibiza este verano. He soñado que estaba en Ibiza pero era horrible: una fiesta al aire libre y todo el mundo sudando, sudando muchísimo. Asqueroso. Y encima me había dejado la maleta en el avión o yo qué sé. En fin, lo de hoy (sensación onírica) ha sido genial y divertido. Quiero verano y quiero LUZ. Luz y calor, externos e internos. ¿Palabras que abracen? Por dios. Yo quiero abrazos con palabras y abrazos sin palabras, pero abrazos. ABRAZOS.

Qué raro es todo. De verdad, dónde está el yo de hace ya. Dónde lo habré guardado. Porque leo cosas con tal ímpetu y razón, tan jodidamente diferentes a esto, que me asusto. Me da la impresión de que acabo de llegar, como si fuera el suplente de un puesto perpetuo, ser DANIEL. Perdón, Harold Chasen [?]. Si aceptamos una realidad cibernética que difiere del contacto escrito convencional, también aceptemos esto: proteger la intimidad, maquillar la intimidad o suplantar la intimidad. Yo apuesto por lo primero. Al menos la mayor parte de las veces.

Debo terminar mi redacción de las imágenes y leerme textos de cómo hablan los monos. Dios, la oscuridad viene y va y no me doy cuenta. Al menos cuando está yo puedo dormir y andar por la calle. La oscuridad agarra al viento y no deja que se suelte. Cuando lo hace, ambos se convierten en unos grandísimos hijos de puta; pero bueno, quién no.

Tengo una silla nueva y quiero twist and shout.

*

Hay enfermedades y psicopatías. Lo primero es hasta un cumplido comparado con lo segundo: implica compasión, lástima, justificación. Lo segundo es defensa y rechazo. Ay. La gente que plagia textos ajenos es triste, triste. Deberían hacerse una vida completa, sin ciber-obsesiones, ilusiones inexistentes, sentimientos vacuos. Lo que existe existe y lo que no, no. Parece difícil pero a los 18 debería dejar de serlo. Quien opina lo contrario que madure de una puta vez. Pero vamos, qué asco. Qué pena que no pueda poner en privado el fotolog. [L_artpourl_art el 18/02/2010. Privatizacion. Si la empresa es precioaceptante, en un mercado competitivo, la curva de demanda se mueve pues hacia la derecha o hacia la izquierda, porque varia algun otro factor como puede ser que un huracan arrase el departamento de ecomonia de la UC3M que por cierto esta entre los cien mejores del mundo. He dicho]

17

Tu mánager y tu tó pa ti y pa mí pa siem. Felices 19. Te amo (L). -Vuelvo a Londres; porque a Londres no se va, a Londres se vuelve. Mañana estará lloviendo. El domingo no sé dónde dormiremos; más bien, no sé dónde diablos estaremos. Al menos son menos tres grados y no menos cinco o seis. Ay.

Tanta cosa. En plan de encontrarte de repente a las 5 de la mañana y no sé. Me apetece tanto lo de esta noche. Tocarle el pelo a Bea en 12 horas y chillarle al Tames.

“Ayer me hice tres pajas. Las tres me costaron lo mío. A veces no te queda otro remedio que acabar retorciéndote para conseguir tu propósito, al igual que en cualquier otro tipo de ejercicio. Se trata simplemente de fuerza de voluntad. El que sea capaz de venir a decirme que una paja no es un ejercicio, la verdad, no sabe lo que se dice.También hago muchas otras clases de ejercicio. Subo y bajo andando la escalera. Me meto en taxis y reservados de restaurantes. Voy a pie hasta el Butcher’s Arms y el London Apprentice. Toso muchísimo. Vomito con frecuencia, y éste es un ejercicio que te limpia de verdad. Estornudo, subo al metro. Entro y salgo de la cama, con frecuencia varias veces al día.”

(Amis)

28

Resulta que la ficticia Atonement se ambienta en Dunkerque y no en Calais. Bueno, yo pensaba que podría haber dos lugares de retirada, y Calais siempre tuvo importancia en esto. “En mayo de 1940, fue un objetivo clave de las fuerzas invasoras alemanas y fue el escenario de una última defensa, que permitió que las fuerzas inglesas derrotadas pudieran ser evacuadas desde Dunkerque tras la batalla de Dunkerque. 3.000 tropas inglesas y 800 francesas, con apoyo de barcos de guerra de la Royal Navy, resistieron desde el 22 hasta el 27 de mayo de 1940 contra dos divisiones de panzer alemanas. La ciudad fue arrasada por un bombardeo incesante y sólo 30 de los 3.800 soldados defensores fueron evacuados antes de la caída de la ciudad.” Dunkerque albergó la Operación Dinamo. Como dar una enorme patada a cientos de miles de soldados; pero sólo una. Sólo un pie y una oportunidad.

Cuando fui a Calais (la primera vez; en la segunda ocasión ya estaba preparado) empezaba a tener friebre o mierdas por la garganta, y sobre todo FRÍO. Fue a mediados del viaje más largo de mi vida. Hasta tardé menos en ir desde Madrid a París en coche. En fin, cuando llegué a Calais por primera vez me sentía emocionado. Ese lugar estuvo completamente destruído hace cincuenta años; seguro que tú, mujer de treinta años con bebé, y tú, hombre anciano que vende helados, sois hijos o hermanos de personas que murieron o sobrevivieron en Calais. En fin, todos acabamos siendo hijos de la guerra o de la paz, pero por entonces había leído Atonement unas semanas antes y no podía evitarlo. Miraba a la gente con excitación y les preguntaba sobre la película (“¿Se rodó aquí?” Por supuesto, no me contestaron). Acabamos andando dos horas por carreteras hasta llegar al ferry. Salimos de París (al menos, del hostal de París) a las 10 de la mañana y llegamos al de Londres a las 23. En fin, nos pusimos enfermos.

Marzo

1

Odio las idoteces que se suelen poner de moda. Así, de repente. Como los móviles-cámaras táctiles. No me gustan nada. Quizá porque a mí uno no me duraría mucho, pero aun así me parecen anti-higiénicos y casi obscenos. Todo el rato tocando la pantallita. Luego ésta acaba llena de huellas dactilares y mierdas del dedo. Joder, que lo tocamos todo con las manos. Es como si inventan un móvil lengual: todo el mundo dale que te pego, chupando la pantalla. Poco falta.

Odio marzo. Profundamente. Me recuerda a una mujer insoportable y pseudo-religiosa cuya única misión es tocar los cojones y mirar con cara de buitre a la gente por la calle. Odio marzo y odio haber dormido hoy 12 horas y tener todavía sueño. Dios, “me follo a siete mujeres al mes y aun así me siento vacío”. Yo que tú empezaría yendo a un dentista. Todo el mundo se muere por soltar su mierda cuanto antes; a veces me siento como en un combate de desesperados en vez de en una simple conversación.

Hace un año estaba estudiando la guerra fría y vi La chaqueta metálica. Hace dos, Eyes Wide Shut. Pero ahora no hay nada. Me encantaría estar estudiando historia para encerrarme nueve horas diarias con libros. Eso. ESO. Esto es una mierda. Marzo es una mierda.

5

Nihilismo animal

Ayer Inma no paraba de repetir una y otra vez que estaban por todas partes, que hasta en las paredes, en los escaparates, en las miradas; todas las cosas lo mostraban. Venían hacia nosotros y no iban a detenerse. Mientras lo decía casi llegó a convencerme. Las paredes, cubiertas con graffitis grotescos que apenas se distinguían; en el suelo, en los coches. Las expresiones de la gente también parecían cubiertas de pintura. Pintura de sonrisas malintencionadas y miradas de muerte. Dios, ¿es que de verdad se supone que tenemos que seguir esto? Terminar, empezar, terminar, empezar. No hay términos en el lenguaje que denominen otra senda. Otra senda es desviación, vaguería, inmadurez. Esclavos de las palabras.

Yo no quiero. ¿No os apetece salir de la acera en Gran Vía y correr con y contra los coches? O bailar dando vueltas con los brazos en cruz, o golpear a la pared hasta que te sangren los nudillos. A mí no, pero es lo que acabará ocurriendo. 44 millones corriendo por Gran Vía como locos, sin rumbo, sin orden. Todos buscándose a sí mismos entre la multitud. Los débiles muriendo sepultados por los fuertes.

Dios, sí, sí. Lo tengo. En fin, estoy seguro de que lo haría bien. Si me dedicara y tal. Quizá de los mejores. Y lo digo para justificar lo siguiente: el circo mundial. Un circo mundial de verdad: un circo que sea un mundo. Sería grandioso. El espectáculo televisivo más fascinante. Incluso por encima del ficticio Show de Truman. Y bien: tribus intactas, sin influencia del hombre moderno, neolíticas. Ver y esperar. Introducir elementos sin que se den cuenta. ¿Se formarían ciudades-estados? ¿Intenciones imperialistas? ¿Descubrirían el metal? Podríamos asistir al pseudo-nacimiento de la civilización a tiempo real. Todos viendo en televisión como tiran al río a una mujer adúltera o sacan el ojo a uno que sacó el ojo. No me digáis que no sería rentable. Todo el mundo lo vería. No podrían evitarlo. El mayor experimento sociológico del mundo. La demostración de la ausencia o existencia de patrones comunes en toda sociedad.

Hasta yo lo vería. Me odiaría, claro; pero no podría evitarlo.

9

Hoy hablé al sol por primera vez. Nunca había pensado en hacerlo; no me suele caer, en general, muy bien. Pero hoy, necesariamente, le hablé. Le dije: ven. Ven ya. Date prisa o tendré que ir a buscarte.

22

Confundir luces con reflejos es frecuente. De repente, un charco que alberga luz: parece que la contiene, que vive en él; tan nítida ésta como si de la verdadera se tratara. Puede uno manterse mirando el charco un tiempo: sorprendido por la claridad, las formas, el amarillo intenso. Si se asoma por encima observa el origen: quizá una farola, el sol o la luna. Aun así, algo empieza a fallar: si cae una piedrecita el charco éste se deforma por las ondas. De repente uno se da cuenta de que es falso, representación, reflejo de la realidad: como una fotografía bien hecha o una palabra que no dice nada. La única solución es pisar el charco hasta que el agua se esparza por las aceras y desaparezca. La luz ha dejado de existir: seguirá arriba, en el cielo, o en cualquier otro sitio. Pero, definitivamente, el puto charco no volverá a reflejar luz que no es suya nunca más. Es como estar rodeado de psicópatas: o los matas como si de moscas se trataran o les tiras trozos de pan (como a las palomas o a las ratas) para que se vayan durante un tiempo. Y no sé, pero creo que me encanta matar moscas metafóricas. Aplastarlas hasta que sus sesos escapen de la piel. – No sé qué dije de ellas pero ahora da igual: las nubes son como ideas porque se mueven; van y vienen. De repente aparecen y se estancan durante horas y horas; hasta se confunden con las otras y todo se vuelve blanco o gris o negro. Otras veces aparecen aisladas en el cielo y se mueven como si de verdad fueran a algún sitio. El viento las impulsa como nuestro camino impulsa lo que pensamos. Ayer las miraba, por la noche e iluminadas por la luna: venían y se iban. Me recordaron tanto a mis sensaciones- percepciones-ideas. También a barcos que vuelan deprisa: me dieron ganas de gritar que me dejaran subirme. Volaban hacia el sureste: Ibiza. Como mis ideas. En fin, luego está ella. Es una niña juguetona. Lo sé. Cuando conversamos y se dedica a poner diferentes caras para que yo las interprete, acaba al final revelando lo obvio: sonríe. Como una niña. La luna es una niña juguetona.

29

¿Hace cuanto que no veo Donnie Darko? Le faltan tres meses a los dos años, creo. Vine y me fui. Obviamente, sin volver a verla. Y es que todo se repite. Me viene a la idea el eterno retorno y a Harry Haller corriendo por pasillos dorados. Es como una etapa. Lo recordado vuelve, lo nuevo se recuerda como si se hubiera hecho. En fin: me siento como cuando los padres de Donnie se van y le dejan solo con su hermana. La casa (hasta hace una hora o así, aprovechando desconocida explosión de toroides o adrenalina o a saber) se parecía. El olor: mezcla de tabaco y papel quemado y apatía. Ayer volamos y quiero irme al Tibet o a Nepal para aprender kung fu y abstraerme. No me dan miedo los extraterrestres. Sólo me dan miedo los psicópatas.

Abril

1

Por fin. Empiezo abril mal, peor que nunca. Mientras pensaba que no iba a llegar a mayo busqué otras formas de dormir: nada. Es difícil ser original.

Y hay veces en las que esta cama me parece demasiado grande. Me hace sentirme solo. Por eso no estoy del todo incómodo cuando Inma o Cris se quedan a dormir: me tranquiliza oir una respiración constante (y ruidos raros complementarios).

En fin. Da igual. Casi todo. La gente estúpida que viene y que va, el verde cuando brilla más, los sube y baja de las relaciones. Si te mueres todo eso acaba y ni siquiera sé quién se va a quedar con mis libros. Al menos con unos cuantos.

8

He soñado tantas cosas raras. Veía la Luna y Marte cerca con Clara en un prado y teníamos como dos o tres coches escarabajo verdes. Y no parábamos de ir arriba y abajo porque llovía y luego estaba esa casa. En fin, no sé. Mis sueños me desconciertan. Dicen en Pushing Daisies que son restos de pensamientos que se vinculan al azar, y lejos de creer cualquier tipo de teoría onírica (psicoanalismo, bla) prefiero pensar que estoy ahí también. Como cuando sabes que estás pero sin estar. Hasta me he emborrachado. Ha sido divertido. Ahora tengo hambre y abril avanza como una mosca cuando se vuelve loca. Yo creo que me entienden porque las comprendo; en general, a todos los bichos voladores hay que hablarles con susurros (si no, con gritos) y decirles lo que hay. Tengo miedo del 2 de junio. No sé qué voy a hacer. Sé qué no voy a hacer, pero no sé qué voy a hacer. Echo de menos la probabilidad y la lógica y mira, si, también de vez en cuando el 2008. Ser adolescente era como oh. Aquí estoy yo. Ahora estoy sereno y casi aburrido. Tengo que cortarme el pelo y que miren mis ojos y yo qué sé qué más. Odio tener muchas cosas para un día, me estresa.

Termino las clases el 6 de mayo. Cuatro exámenes después, me voy. Y es que me voy. No sé. Es raro.

Hay muchas cosas. Dios, abril va tan rápido que apenas puedo pillarlo algunos días. ¿Qué ha pasado con enero febrero marzo? Abriré los ojos y estaré en 2020.

Y sí, avanza. Que no tema a mayo y que termine; junio, junio. Maldita clasificación lingüístico-temporal. El tiempo es dinero. El tiempo no es dinero. No. No se desperdicia, se transita. Hace un año rompíamos a una amiga invisible, hace dos años revelaba mi primera verdad. Quizá hace tres años hice algo trascendental (Harold) pero ya no me acuerdo.

15

[Foto de Diane Arbus]

La gente no puede ser más decepcionante porque no sabe. En esa pérdida de la enseñanza racional, disciplinaria, responsable y represiva, se ha perdido en las nuevas generaciones la capacidad de análisis y balance constantes. Proceso que generaba frustración y limitación: los progres de los 70 niegan con la cabeza cuando ven a Fernandez de la Vega en la TV “con esas pintas”. Algunos superponían lo racional y saltaban a lo grande. Ahora no hay nada: se toman decisiones vacuas e infrahumanos pueblan las facultades de ciencias y tecnologías. Y las facultades de letras también. Nadie se salva: la masa, la masa. Antes de ponerme tópico diré que la moda parece ser ahora la decepción pseudo-impulsiva. Ya no hay buenos modales. Y mira que decir yo esto. No creo en las convenciones sociales. Me parecen innecesarias: es como si la venda (casi necesaria) con la que nacíamos hubiera caído definitivamente. Pero creo en vías; vías mejores, vías peores. El compromiso es, definitivamente, una vía fiable en lo que se refiere a las relaciones. No hay relación sin compromiso. El compromiso no es represión: uno se compromete cuando decide. Si no quiere comprometerse, sólo tiene que aportar las razones existentes y adecuadas. Pero es que no hay ya razones. Nadie tiene razones. Breton sólo es surrealista cuando deja de ser surrealista, ¿no creéis? El resto del tiempo es un coñazo. Y todos los que se creen algo con 18. Dios, es que no. No es creíble. Veo mentiras en cada mirada. Con esa sonrisa perpetua y esos ojos de yo no sé qué está pasando pero da igual. Me dan ganas de sacárselos, a menos para que dejen de mirarme. Hoy guié a una mujer borracha que ni leía las paradas de metro y ayer conversaba con alguien que creía ser alguien porque nunca había sentido que era alguien. Creerse alguien sin sentirse alguien es asqueroso. La pureza se huele. Y los actos también. Me dan ganas de afeitarme las patillas y pintarme la cara de colores. Dios. La tecnología nos está matando. Por eso sería ir tan cómodo con una sábana por encima cuando saliera a la calle. Podría irme a vivir a una residencia de ancianos. Los ancianos siguen en la anterior oleada de fatalidades traumáticas. La pregunta es: ¿dónde están los que se quejaban? Están todos muertos. Y de verdad, antes de morir por ellos saco un ojo con cada dedo a todo el puto mundo.

Estoy enfadado porque he dormido poco y ando por la casa como si me hubieran dado una descarga eléctrica con el pum pum pum saltando como un loco. Además de resacoso, claro. Me apetece romper cosas, simplemente. Un zumo de naranja y romper cosas. Cosas y a gente. [L_artpourl_art el 18/04/2010: Esta semana sera buena, ya veras]

22

Dios. Tengo una coraza. Creo que me he insensibilizado de por vida. Iba cerca de Juan Ciervo o Juan Rey o una calle que conozco perfectamente pero de la que ahora no recuerdo el nombre… sí, iba cerca de allí, donde está una sucursal del Ruber para limpiar dientes de viejos forrados con zorro, cuando intenté cruzar la acera y un hombre de traje a rayas verde-blancas se adelanta en coche y casi me atropella. Había escrito atropolla. En fin, casi me atropolla y mientras tanto me miró; creo que se fumaba un puro o alguna otra guerrería. Tenía el pelo blanco y barba y cara de depravado. Me hubiera gustado subirme encima del coche y meter la mano por la ventana e intentar arrancarle algo de la cara pero me encuentro muy débil. Y es que a veces pienso que voy a morirme de un día para otro. Ya es la segunda vez que pasa ESTO, esto de estar así después de y no saber qué hacer. No sé si ver Pussing Daises o hacerme un bizchocho. Podría darme un baño pero acabo aburriéndome: absorbo todo el calor. Mi cuerpo no desperdicia ni una. Yo a veces lo pienso y hasta me siento avergonzado: pobre, pobre. Quizá se merece a alguien mejor. Lo minusvaloro y subordino. Normal que se rebele poco a poco. A veces nos llevamos bien: cuando le pongo crema o salgo a correr o me como un tomate. Pero estamos destinados al fracaso. Noto cómo me quiere matar por dentro. No creo que tenga muchas fuerzas para luchar, joder, no creo. Al menos hoy. Todo el cielo lleno de nubes enormes y grises y blancas y azules y no pasa nada. No llueve, no hay viento; nada. Vivir una catástrofe es convertirte en ser humano: no nos hacemos estudiando carreras, follando o yendo a la iglesia. No. Nos hacemos, nos creamos, en los límites. Hasta que llegue a un límite, un límite enorme, horrible, genérico; hasta entonces seguiré pensando de vez en cuando que nada de esto ocurre. Nada. Mentes binomiales. Algo ocurre porque algo no ocurre. Estamos poseídos por el espíritu antropocéntrico de dos mil años: evita catástrofes para que todos vivamos en una puta ilusión. Y voy a dejar de fumar. Es como chupar un suelo lleno de chicles y chicles que han ido cayendo durante unos cuantos años.

Antes de eso, a la ida, estuve a punto de llorar en el metro. Casimir Pulaski Day. La he escuchado trescientas veces pero aun así, allí, en ese momento; entendiendo cada palabra… bueno. Si me hubiera salido sangre por la boca la gente se hubiera quedado igual de impasible así que tampoco pasa nada. Pero me ha parecido curioso.

I remember at Michael’s house

In the living room when you kissed my neck

And I almost touched your blouse

In the morning at the top of the stairs

When your father found out what we did that night

And you told me you were scared

Oh the glory when you ran outside

With your shirt tucked in and your shoes untied

And you told me not to follow you

24

[Foto de Diane Arbus]

De verdad que no entiendo ciertas cosas. Tengo un adorno de Navidad que consiste en un corazón forrado de purpurina dorada (que suena a dorado de purpurina forrada y que también sonaba a la misma oración origen así que lo borre) que lleva en mi cuarto casi toda la vida. Bueno, no. Creo que lo encontré hace unos meses limpiando el armario. Saqué seis bolsas de basura. Dos eran ropa y zapato para el convento. Otra, para juguetes. Las otras seran basura; basura de verdad. Papeles y envoltorios de chicles y trozos de cosas se amontanaban ahí. En fin, en un momento me pareció absolutamente acertado guardarlas. Lo sigo haciendo. Papelitos y tickets y trozos de cosas que tengo por todas partes porque me recuerdan a tal. Decía que entonces, creo, encontré el corazón y lo puse por alguna parte. Estaba en ese momento redecorando el cuarto y poniéndole el techo y el libro de visitas que pensé que sería últil guardar el corazón para que estuviera presidiendo el libro de visitas. Porque lo colgué (tenía una cuerdecita para que fuera colgado en una rama del árbol) por el saliente de uno de estos bichos que sirven para clavar cosas en la pared y que la mitad de su cuerpo, cubierto de plástico de colores como con sombrero (que se parecen a las piezas de un juego antiguo cuyo nombre no recuerdo, elementos que Magritte usa sin parar y que recuerdan a piezas de ajedrez); la mitad de su cuerpo puede ser utilizado para clavar cosas por la cuerdita, y como el corazón tenía cuerdita pensé que sería últil colgarlo. Así que pensé en colgarlo y luego lo colgué, y quedaba bien ahí presidiendo el libro de visitas. Luego el libro de visitas se caía, se pasaba de hoja, se tocaba demasiado y el corazón siempre se desencajaba del bicho y el bicho también se desencajaba de la pared. Así que se cayó por el cuarto un día de estos. Hoy, buscando magia debajo de la cama, Paula lo encontró y se rió y yo le expliqué que lo utilizaba para presidir el libro de visitas, y no sé si me entendió pero siguió riéndose y a mí me parecía absolutamente normal. Me acabo de acordar así que os lo he explicado.

Dios, mi pensamiento va tan rápido. Y mis manos. Y mi corazón. Si dejo de escribir es como si parara de correr en una carrera. Me alejo de la pantalla. Tengo que volver. Es como necesario. Me aviva. Vivaa. Viava. No se encuentran palabras con tanta uve muy a menudo. Encantado, señora. Oh, no, mi placer. Sí. Estoy contento de volver a verla. Volver, a usted también le debo el honor. Tantas dobles palabras con uve. Qué divertido.

No puedo parar. Ay dios. De verdad que lo intento pero me quedo como atrás. Tengo que volver. Podría reconocer todas las palabras con doble letra que van pasando. Como pasando. Lleva dos aes. Y lleva. Dos eles. Lleva lleva dos eles, no lleva dos eles a secas. Eles. Eles también. Ya no se me ocurren tantas palabras… quizá ocurren y tantas y palabras. Pero palabras ya lo dije, ¿no? He tenido que decirlo. Estoy seguro. Dios, me faltan… Vaya. Ninguna. Ahora faltan y vaya y ninguna, pero antes de esas dos palabras sumadas a esas y palabras y sumadas, pensaba que palabras ya lo había dicho. Porque ahora lo he dicho de nuevo, claro, y sumadas y palabras de nuevo también. Todas. Todas juntas.

26

Verano. Hoy ha venido. En fin, mañana quizá se vaya y vuelva ese extraño híbrido entre primavera y… primavera adolescente. O primavera bipolar. Con el “ahora lluevo” y “ahora mato”. Pero el olor me encanta. El olor de la noche de verano. Las noches de verano son lo mejor que tiene el verano. De hecho, todo lo demás en verano (al menos en Madrid y en media España) es horrible. Odio el verano puro, el verano de salir a la calle y pensar que estás realizando algún tipo de acto heroico al enfrentarte con el sol y las calles vacías. El verano arriba, a partir del Canal de la Mancha, es encantador. Abajo también, pero tiene días y días. En fin, las noches de verano con su olor a noches de verano. Me recuerdan a mi infancia. Tuve una buena infancia oliendo noches de verano y duchándome después de la piscina y jugando a cosas. Y por mi ventana siempre entra el olor a tortilla francesa. Alguien lleva preparando tortilla francesa en las noches de verano once años. Qué gracia.

Mayo

4

Esto es una farsa. Pensé que iba a sufrir una verdadera semana de estudiante universitario y he visto seis capítulos de Glee en un día. Las ventanas, en el fondo, son enormemente útiles. Nos avisan de cómo se mueve el mundo y de cuándo la luz llega y cuándo no. Todo entra por la ventana. Uno puede bajar la persiana y olvidarse por un rato de que nos movemos en un bicho gigantesco que levita epípticamente alrededor de una enorme masa de fuego porque ambos se atraen. Dios. Es como si viviéramos en la espera de lo inevitable. Somos los pensamientos de ése que no se atreve a acercarse a sino que gira y gira alrededor. El castigo por convertir en una constante lo que tendría que haber sido inevitable. Y quizá algún día ocurra: la Tierra cambia su rumbo y gira hacia el Sol y el Sol se come Mercurio y gira hacia la Tierra. Y en los tres o cuatro meses que eso dure, todos acabaremos muriendo poco a poco de calor y las tonterías de sentimientos y trabajos de imágenes, y las guerras y violaciones no significarán nada.

16

Últimamente (año, año y medio) recuerdo cosas bonitas/tristes que me provocan añoranza/melancolía/asco/felicidad con náuseas. Nada que ver con mis naúseas, esas del curso pasado; no, no. Principalmente porque ya no recuerdo nada. Sólo en tardes de domingo en las que el tiempo avanza tan rápido que no hace falta ni quitarse el pijama. En fin, quizá tenga náuseas porque me inflé a muffins o quizá no. Dicen que lo peor que le puede pasar a uno (o algo parecido) es odiarse a sí mismo. Bueno, yo no sabría que decir. No sé cómo odiarme a mí mismo o quererme a mí mismo. Creo que alguien que se quiere o se odia a sí mismo tiene algún tipo de psicopatía leve. Amar y odiar. Son verbos aplicados a personas y cosas de fuera. Dios. No sé. Y sí, hay gente que definitivamente no ha nacido para entender o ser entendida en el lenguaje de signos. Que nadie infravalore por ausencia de comas; la admiración está en observar dos ojos encendidos de fuego y sentir expresividad. Unos miran, otros escriben, otros hablan, otros pintan. Eso sí, no intentes mirar con cara enigmática si no eres enigmático porque parecerás gilipollas. Y no intentes escribir dando por sentado que lo que quieres expresar se expresará porque también parecerás gilipollas. Pero como sólo vivimos aquí dentro y salvo en ocasiones especiales relacionadas con cápsulas blanquitas somos incapaces de salir, todos nos comportamos como gilipollas y miramos enigmáticamente a gente que no sabe por qué cojones son observados de esa manera, y escribimos intensa y frenéticamente pensando que el receptor dirá OH y lo hará. Y no. No.

Ayer, andando por la calle volviendo de algún sitio… quizá no fue ayer sino otro día anterior; la cosa es que pensé lo típico de qué haría yo si supiera que iría a morir al día siguiente… lo pensé y dije: bueno, quizá no valdría la pena vivir. Joder, todo el mundo abrazándote y tú con miles de cosas que arreglar y aun así yendo al baño y bebiendo agua porque tienes sed. Es que es todo tan gracioso. Creo que voy a conformarme con escribir un testamento antes de irme a Londres -por si acaso-. [1209744179 el 16/05/2010: Me quedaria un par de libros y el recopilatorio de Hendrix de tu madre xD. Es broma. No quiero que te mueras. En fin, los domingos suelen ser horribles pero VAYA]

17

Estoy contento y en dos semanas y dos días estaré aún más contento. O eso espero. Sí. La esperanza no existe. Llegué a esa conclusión cuando andaba por una calle enorme donde está el metro de Diego de León. Que existe como construcción cultural; es el eufemismo más sucio del mundo. Dios, el amor, la sociedad de la información… todos existen sólo como construcciones culturales, que no es lo mismo que afirmar que existen siendo construcciones sociales ni, ni mucho menos, que existen a secas. Pero da igual, agarro la esperanza por la cabeza y la abrazo; me niego a soltarla. Como a un peluche. Sigo durmiendo con Demian aunque siempre acabe en el suelo. Sigue sin arreglar mi falta de cariño. Bueno, resulta que me metí a Martínez Izquierdo y encontré la casa que aparece en la fotografía (cortesía de Google Maps). Qué casa tan curiosa. Estuve un buen rato observándola y lo gracioso es que casi todos los transeúntes hacían lo mismo. En fin.

*

Hoy he soñado contigo. Creo que es la primera vez. No tengo razones para soñar contigo, vamos; por eso me extraña.

Resulta que celebrabas una fiesta en el bajo donde ahora vive Luis, un chico con pelo largo que salía en Google Maps en mi calle y con el que hasta jugué cuando era pequeño. Celebrabas una fiesta y supuestamente estábamos “todos”; como siempre, un concepto difuso y genérico que engloba a todos y a nadie. Aun así, no me sentía especialmente cómodo. No sé si fue antes, después o durante, pero creo recordar que mientras estaba ahí (a punto de entrar, o dentro para luego salir y esperar un rato) recordé lo que pasó un verano (u otro periodo de vacaciones) en el que cursé algún tipo de clase en una institución que se levantaba sobre una montaña. Estaba relacionado con lo audiovisual, y recuerdo que en el último día nos entregaron unos trabajos que hicimos al principio un poco extraños. Yo colaboré con Cristina, una chica de clase de 3o de la ESO que en mi sueño había abandonado el curso a mediados. Le entregamos el trabajo en ordenador portátil así que me llevé una sorpresa al ver que me lo devolvían (¡lo había comprado!); así podría llevármelo a Londres. En fin, aun así era todo muy raro porque creo que nos obligaron a ver una película pornográfica o sadomasoquista y nos dejó un poco de mal cuerpo; pero nos despedimos de los profesores y todo era más o menos normal. No recuerdo muchas cosas, claro. Pero recuerdo la sensación de malestar y amenaza. Entonces volvía a la casa donde celebrabas la fiesta; quizá nunca me había movido de ahí o al contrario, eras tú el recuerdo y lo otro la realdiad onírica. De cualquier modo, todo era muy gracioso porque yo sentía que por culpa del trabajo por ordenador algo me había pasado: crecía y crecía, como si estuviera embarazado por todas partes. Así que no entré a tu fiesta por eso. Me he levantado queriendo vivir en mi casa el resto del día. Odio levantarme así. Dios, odio que me obliguen. Que me miren obligándome a expresar algo, que me presionen, que me lean cuando no quiero que me lean, que me toquen. Me gusta la gente que huele a suavizante de la ropa. Creo que me recuerda a algún compañero de la guardería; a Fátima (la gitana) no, pero todos los que tienen un diente negro me recuerdan a ella así que tampoco me disgustan del todo. Es tan difícil a veces continuar simulando que vivo en una red; con sus leyes, sus ángulos, sus texturas. Como sonreír continuamente cuando pasa alguien a tu lado. Un día saldré de clase tras darme cuenta bien; como W en Antonio Machado. Como ante-anoche. Saldré de clase corriendo y llorando como un loco (no recuerdo la última vez que lloré así que no estaría mal) y me buscarán y buscaré y ninguno encontraremos nada. Todos corriendo y buscando y llorando y gritando. Parece que la energía existe para ser usada.

Verano. Sí. Por fin. Creo que estoy en exámenes pero es que estaba soñando algo demasiado comprometido y no podía salirme. Lo siento. Me dan ganas de ir a los ciberlibros y pedirles perdón. Pero ahora saldré a la terraza con el portátil y estudiaré y leeré y haré cosas. El portátil es como un libro calentito y grueso. Me gusta andar medio desnudo por aquí y beber leche fría.

23

Vaya. A veces me arrepiento de no haber aprovechado mi adolescencia in that way.

Envidiaré a las nuevas generaciones. Supongo que nunca seremos conscientes de la suerte que tenemos por nacer después; de la suerte y de toda la mierda que eso conlleva. Somos tan poca cosa. [1209744179 el 30/05/2010: Yo tambien las odiare. Y las envidiare. Y les dare clase]

*

Mis padres han comprado salchichón de ciervo y me niego a comérmelo. Me parece obsceno. […] En fin, si tuviéramos que ir a la caza de la vaca o de la gallina cada vez que quisiéramos comer, muchos nos haríamos vegetarianos. A mí me gusta correr por el monte pero no perseguir a un animal para comérmelo. Pobre ciervo. El salchichón huele a animal muerto y triste.

30

Es todo muy extraño. En fin: las frases me recuerdan a momentos. Cuando en Volcano decía Damien “don’t hold yourself like that, you’ll hurt your knees” sugería y hasta consolidaba una constante: grava fija y gris, corriente de aire, nube perpetua. Pero ahí; estuvo ahí y empezó a estarlo también cuando se dejó ver. El resto es más explícito: “you give me miles and miles of mountains and I’ll ask for the sea”. Todo es así: estamos tan lejos que nunca seremos capaces de entendernos. Como cuando la luna quería ir hacia el sol porque estaba embrigado por su luz. Nunca la alcanzaba porque el sol lo evadía. Hace dos años decía que… bah. Decía tantas cosas. Ahora, de nuevo, todo es muy extraño. Simplemente. No hay nada que no se mueva. Y volveré a necesitar 0 y 9 para dormir la primera noche; volveré a ir a P. park en días de crisis, volveré a Bloomsbury, buscaré todos esos parques, buscaré los bancos, la hierba, los portales, las cafeterías. Estoy condenado a buscar para recordar, entender, olvidar. Quizá no haya otra cosa que hacer. Quizá el resto que nos queda será un devenir continuo de momentos anteriores: transformaciones leves pero reiterativas; como la misma llama en el fuego del cambio. Quizá ya haya llegado. Pero me voy sin arreglar nada; llevo tanto tiempo arreglando cosas que el no hacerlo es anormal. Dios, si es que hasta sigue ahí el “me das asco” después de la primera estrofa. Me voy, me voy, me voy. No hay mejor forma de solucionar problemas que destruyéndolos por completo.

(Y no puedo parar de pensar en un día. No recuerdo cuándo; quizá en el 2008, quizá en el 2009; verano, septiembre, abril. No lo recuerdo. Es atemporal. Pero sí recuerdo que me iba a ir justo después y que tenía que hacerlo. Fui a tu casa corriendo, no podía creerlo. Era tan patético. Fui a tu casa y había empezado a llover; creo que era una tormenta de verano así que seguramente ocurrió en junio. Te avisé y esperé. Esperé durante media hora y no viniste, así que me fui. Totalmente mojado. Era lo que tenía que ocurrir -creo que tú ni te enteraste-. Nada más. Eso. Pero nunca me había sentido así: derrotado, definitivamente derrotado, pero complaciente. Era lo que me merecía. Ahora ocurre algo parecido pero en vez de tú son miles, en vez de la lluvia son días de calma aparentemente felices, en vez de cualquier viaje es un viaje. Quizá deberías haberme… Nada.)

Junio

8

Ya no soy muy capaz de distinguir el compas; quiza nada capaz, vamos. Aun asi, lo he hecho. Me falta una nota. Mas aguda que esa en la que solo se aprieta el dedo gordo (y a la que yo he llamado do). Pero era genial estar ahi, tocandola, y todas las palomas mirandome entusiasmadas y los bichos correteando por la mochila. St James Park tiene encanto. Tambien los desconocidos, claro. Es genial observar como todos se mueven; cuando sigues a unos cuantos, parece que hay una guerra detras o el paraiso delante. Grupos de desconocidos corriendo de algo o a algo y yo siguiendoles mientras tarareo Chelsea Hotel. Demian. Estoy preparado. Ma… y esa letra que le sigue (odio utilizar sustitutivos cutres rollo nh o ni), y luego ana, sera otro dia. For sure. Sera otro dia y cogere un autobus y viajare a Essex. En fin, Londres siempre va a estar aqui. Parece que espera algo, como yo, como todos.

19

Es que no me gusta nada no disponer de acentos ni ñ en teclado ni… no se, esas cosas. En fin, no pasa nada. 19. Llevo diecisiete dias. Es como si llevara toda la vida aqui y a la vez como si hubiera llegado hace dos dias; llegado, nacido, revivido. Revivir tiene una connotacion demasiado evidente: es solo volver a vivir, recuperar la vida; no hacerlo con impetu o excitacion. Estoy trabajando. Me siento como si realizara algun tipo de experimento o juego. O como si estuviera en la escuela. Tengo que hacer esto correctamente y luego hacer lo otro (correctamente tambien, claro) y asi en sucesion. Y hoy, sin duda, fue un dia horrible. Oxford Street es la calle mas repulsiva de Londres. Al menos los sabados a las siete. Y dios, fue tan extraño caminar cargados de bolsas azules y grises mientras el viento nos azotaba; buscando comida, banco, papel de fumar, autobus; luchando contra las oleadas de personas contratadas para aparentar que Londres no murio en el siglo pasado. Y sosteniamos miradas y ellos bajaban las suyas, y aun asi todo seguia avanzando y solo fuimos dos minusculas cabezas (peludas, peludas) que fueron de un lado a otro entre el ruido y las obras y el maldito Marble Arch. Una vez dije que Marble Arch no era tan especial. Ahora lo confirmo. Solo son piedas que cubren palomas y turistas. Pierdo la fe.

Tenemos un problema. Vivamos en cavernas o no, es un hecho. Y el otro dia, al pasear (cruzando Marble Arch, si, de nuevo, solo para llegar a Hyde Park) por la tarde con el sol yendose y el ruido y la gente escondida y yo alli, entre arboles escuchando canciones que alimentan y sosteniendo un cigarro que no pude encender hasta llegar al lago, ocurrio un cambio algo brusco. Pero no, los cambios son integros o se convierten solo en pequeñas cicatrices. Es como una curva en la montaña rusa. Solo significa una variacion; pero uno sigue sentado ahi entre barrotes negros y cosas de esas. Aun asi me asusta. Me siento debil, me siento debil y echo de menos mas que nunca y no, no me gusta. Empece Niebla. No volvere a leer a Kerouac hasta septiembre, lo prometo. Joder, es que necesito tanto. No cosas. A la mierda las cosas. Necesito fuego. Esto es algo que tengo que hacer solo. Mi castigo.

Julio

29

Todo pasa y todo queda; pero no, lo mio no es pasar. En mi todo queda, como las cicatrices de abrir botes de leche y barrer y sonreir. En fin, una sonrisa no es mas que una sonrisa. Uno puede darle todos los significados que quiera: puede intentar leer en los dientes como si de un libro abierto se tratara y todo dependera de la luz, la luz de los ojos que iluminan y permiten entender o confundir, que al fin y al cabo es lo mismo. Y si, la vida es niebla y no hay claridad salvo para los que creen sentirla. Todo consiste en creerlo, como leer un guion e interpretarlo. Es tan dificil. Y adios, junio, adios. Has sido duro. Tengo ganas de julio. Se suele portar bien.

Agosto

14

Lo indudable es que hay personas y… personas. Las últimas simplemente aparecen: como bolas enormes de fuego que te atraen y te queman a la vez. Las demás son pequeños puntos que refulgen -estrellas en la noche- y mirarlas puede ser bonito, interesante, emotivo… pero no sublime. Virginia no nos contó que tenían en común un reloj y una farola y un reptil para estar en la casa de música. En fin, hay cosas que nunca se sabrán.

18

But greed is a bottomless pit

And our freedom’s a joke we’re just taking a piss

And the whole world must watch the sad comic display

If you’re still free start runnin’ away…

En fin: nunca deja de haber otro mundo. Tanto para el sueño como para un esquizofrénico, el espejo aparece y cruzarlo es inevitable. Me gustaba tocarme el ombligo y bailar y escuchar el bajo de la música. Hoy es 25 de agosto y sigo sin estar matriculado. Ay.

28

He soñado que estábamos AHÍ en ese pueblo antiguo lleno de gente como nosotros y estabas solo, estabas solo y lo decías pero también había algo que nos separaba. En los sueños, la figura que suele protegerte deja de hacerlo en algún momento: quizá cuando se hace efectiva la IMPOSIBILIDAD de una interconexión real. Las palabras con el prefijo inter son tan divertidas. Me gusta Band of Horses. Cuando era pequeño tenía una pesadilla horrible que se repitió un par de veces y que iniciaba fiebre. Estaba abajo y no había nadie y de repente comenzaba a sentir el trotar de innumerables caballos y humanos y a lo lejos los veía venir hacia mí y no podía moverme, así que iba a acabar muriendo aplastado y sólo era capaz de mirar y aterrarme y notar como se acercaban cada vez más. Me dan miedo los sonidos que se repiten periódicamente y que son casi imperceptibles. Como golpes en la pared (tan sexual u homicida, joder) o caballos trotando o ladridos o puñaladas o martillazos. Debería comprarme tapones permanentes. Hoy voy a una barbacoa y necesito cortarme el pelo aka necesito a alguien que me corte el pelo.

*

Anoche me costó dormir y por la mañana he vuelto a despertarme sin querer hacerlo. Cada día me cuesta más. Y es que hay veces que me levanto y quiero prender fuego a la nevera y arrancarme la cabeza y vomitar sobre mis poemas. Más me vale no despertarme nunca con nadie que crea que me quiera: entrará en razón demasiado pronto. Tengo ropa tirada por el suelo y basura por la mesa y dios, tanta cosa amontonada que debo ordenar y arreglar. Cuánto tiempo llevaré huyendo de ello. En septiembre me ocupo. Antes de que me maten. Me he empezado Trópico de Cáncer (intenté leérmelo con 12 años pero no funcionó) y tengo una rabia entre la boca y el ombligo que acabará por transformarse en un monstruo horrible lleno de odio y destrucción.

Septiembre

8

Y es que ahora sólo tengo ganas de acurrucarme entre dos hombros y vestir cualquier harapo y reírme sin esperar o con un café, de estos con hielo y en vaso de cristal transparente. Y oír ronquidos, hacer zancadillas y fotos sin sentido, coger el tren y ponerme a cantar ay ay ay ay cuando venga un pájaro o algo de eso. Es divertido coger trenes. Coger cercanías no: la gente siempre es igual. Voy a echar de menos el champú de Inma. En Londres o Ibiza o Lisboa tenía excusa, pero ahora sólo lo usaré cuando vaya a su casa y como no tiene secador acabaré con anginas. También voy a echar de menos más cosas, claro. Pero tengo una sensación rara. Como si todos fuérais muchísimos primos que de repente habéis aparecido. Así que nos fumamos cigarros a medias, compartimos vaso de agua, plato, cubiertos, camisetas, pantalones, toalla, dinero, confidencias y locura, joder, locura. Puedo alardear de haberme bañado en dos de los sitios más asquerosos de Europa -el Regent’s Canal y el estuario del Tajo- y de haber sido timado por segunda vez en el verano. En fin, como cualquier viaje intenso y multitudinario, es imposible que se condensde en un párrafo de mierda como éste. Pero pienso en Salamanca o París o lo que sea que surja y me hace estar contento, de verdad. Es suficiente.

14

Hago cosas y hace calor. Es como un pacto.

19

Me sorprendo de vez en cuando recordando momentos que nunca ocurrieron; pero que tengo tan asumidos en relación con canciones o escenas que salen solos. El sentimiento de añoranza es el mismo. Cuando ocurren nada más que un paso en la forma de situar aparece. Al final todo acaba. Es tan evidente que antes de comenzar, siquiera antes de haberse acabado, está muerto. Quizá si comienza sin preámbulos pueda perdurar unos cuantos días. Me gustaría levantarte un día con el amanecer y atravesar el gris niebla de Madrid hasta alguna estación. Recuerdo cuando mi abuela se murió y tuve que coger un autobús hacia Mérida a las 3 de la mañana con mi hermana. Llovía tanto que nos perdimos y lo perdimos, y nos quedamos esperando dos o tres horas empapados y hambrientos y sin saber qué hacer. Llevo cuatro años huyendo de mí mismo y no paro de encontrarme. Jim decía que lo que más le gustaba de Catherine era su nuca: siempre podía observarla sin ser visto. Yo veo todo a través de mi nuca. Siento que estoy más allí que aquí. Pero en serio, me gustaría caminar con cualquier cosa y montarme en un tren con poca gente y calefacción. Me gusta el silencio del tren y ver la nieve y mirar a los pasajeros. Ayer fue el cumpleaños de Sara y mañana será el mío. Esto de los cumpleaños ha dejado de tener gracia. No me provoca ni un mínimo de excitación. Pero de verdad que me da miedo. Si vuelvo a verla hundida ya no sabría a qué idea agarrarme para sobrevivir a oleada tras otra de…

23

Cosas que me apetecen:

-Continuar leyendo Los Elegidos.

-Tumbarme en mi cama y restregarme contra la manta.

-Magia y Blanca.

-Beber batido de cola-cao.

-Ver a Kitus, vaya.

Estoy contento. Es mejor que querer morirse o no querer nada. Cuando todo se vuelve aún mas raro que uno mismo, la extrañeza es como salir de una película de ciencia-ficción. Y si tengo cáncer en los pulmones me suicido y ya está. Lo que me agobia son los preparativos: los hospitales y los escáneres y el ir y venir entre un montón de gente que me mira como si fuera un bebé descuartizado que aun así es muy mono. Pero vamos, por ahora estoy sano (creo). Sólo digo que si ocurre, ocurre. Las cosas ocurren. Cumples 19 años y las cosas se te lanzan sobre la cabeza como si fueran buitres que visualizan a un animal moribundo en la tierra. Un buitre muerto también será devorado por los demás buitres. En Paddington, cuando de repente se me ocurrió la estupenda idea de vivir en otro lugar y fui a la oficina para preguntar, encontré en Norlfolk Place una gaviota atropellada sobre la carretera. Cerca había otra más: intentaba acercarse a la muerta y a mí me pareció algo tan bonito que casi me pongo a llorar. En fin, parecen más humanas que nosotros, pensé. Pero me di cuenta al poco tiempo de que sólo quería comérsela. Luego también fue atropellada así que no pudo disfrutar mucho.

Lo nuestro es bastante parecido.

Octubre

5

Ay, ay. Estoy contento. O activo. De verdad que una arritmia de vez en cuando va a acabar por sentar bien. Espero que no, vamos. Pero estos cambios de visión existencial semanales (los cambios anímicos diarios, ps; pero…) me están matando. Ahora estoy más activo que un maldito cocainómano y lo peor de todo es que no sé si servirá para algo. Hoy casi veo Placebo (hasta las 9 de la mañana, cuando me enteré de que el concierto se canceló xD) y casi veo una película también. Y casi conozco a alguien. Estos casis hipotéticos que, como preceden a situaciones obligatoriamente irreales, condicionan todo. Malditos casis. Casi se podría decir que yo estoy enteramente formado por casis. Pero vamos, que voy a Salamanca tras tanto hacer-hacer y disfrutaré como un colegial sin neuronas. Qué guay.

13

Eh, oye, párate a pensar. No estamos tan mal. Ayer volvimos de Salamanca y eso quiere decir que seguimos yendo a Salamanca. Año tras año. Como una costumbre sólida y duradera, de éstas que no se acaban pese al mal tiempo. Y raro es que califiquemos a Salamanca de costumbre. Odias las tradiciones, ¿verdad? Las odias porque existen para desaparecer. Pero Salamanca recién se ha convertido en costumbre; será costumbre hasta que se convierta en tradición. Las tradiciones son como los gatos que matan a las ratas. Pasarán muchísimos años y ya nada se recordará de las ratas, pero todo estará plagado de gatos. Y las tradiciones no son suaves y bonitas; sólo pueden parecerlo. En realidad son trampas. En fin, quizá los gatos también.

Es bueno que me duelan partes del cuerpo. Me gusta tener la maleta abierta y libros en la mesa que todavía no me leí. Hoy hizo sol y me entraron ganas de continuar.

 

24

He soñado algo horrible o, al menos, algo desconcertante. Últimamente lo desconcertante suele ser horrible. Lo desconcertante debería ser genial; debería sorprender y oh, arrancar una sonrisa y cositas de esas. Una mierda. Lo nuevo que desconcierta, es decir, lo realmente nuevo, no es más que un incordio. En fin: he soñado que iba a tu casa en Turín o donde cojones vivas (Turin, como Turambar; da miedo) y esperaba en tu salón con dos españoles que esperaban pillarte marihuana. Nos pusiste Holocausto Caníbal y desapareciste. Era muy extraño. Luego también soñe que una enfermera me confirmaba que necesitaba CULINA; al parecer, una hormona cuya ausencia contribuye en la depresión, pero que también está relacionada con el consumo de drogas duras. Por supuesto, yo no tomaba drogas duras y la culina no existía, así que a lloros convencí a la enfermera de que debía ser depresión y me dejó marchar. Fue emocionante y pasional. Le cogí cariño y me levanté pensando que no tenía sentido. Igual que el autobús mágico al que sólo se entra vertiendo un poco de jabón en el mostrador. En fin.

Bendita magia de buenas noches.

Noviembre

1

Por Dios, últimamente actualizo cada semana; y ni mucho menos siento que estoy abandonando esto sino dejándolo respirar. Antes lo atosigaba a frases poco esclarecedoras y asociaciones de ideas de dudosa lógica. Ahora todo es tan similar a lo anterior que poco sentido tiene en volverlo a escribir; como mis doce entradas que empiezan con “Estoy contento” y “Qué gracioso”. Estoy contento y qué gracioso me recuerdan más a un estado mental inestable que a una buena situación. Pero es que hay tantas personas que no deberían leer esto a veces. No me apetece. Me encantaría controlarlo. Nos exponemos como anuncios a un público uniforme y me parece triste y aburrido. No me gusta que me intuyan. Ya estoy yo para sondear, por ti y por mí. Si tienes curiosidad pregúntame, y si sabes que no te voy a contestar no tengas curiosidad. Deberíamos interesarnos por lo que podemos interesarnos. No, miento: deberíamos interesarnos sin tocar las pelotas. Eso suena demasiado violento… Bien: deberíamos interesarnos y aparentar, mientras, que somos personas normales, equilibradas y maduras que no caen en obsesiones ni entrometimientos. Esta dualidad entre el YO superficie que hace cosas pero en armonía (normalmente) y el YO interior, que está por encima de la superficie y dentro de ésta y detrás y en todas partes, y que ni siquiera se explica con absurdas palabras… Esta dualidad convertirá al mundo en un maldito manicomio gigante. Qué coño, ya lo ha hecho. Qué diferencia hay entre saludar y sonreír a un vecino, hacer que eres un astronauta o estornudar en un pañuelo. En realidad esto no tiene ninguna importancia salvo en los días impares cuando el cielo está despejado y hace viento frío. Pero la intuición es peligrosa. Me entristece incluso antes de que se deje corroborar. Venga. Que alguien me sorprenda.

7

Hoy he vuelto a soñar cosas extrañas. No sé si son las milagrosas plantas medicinales de mi terraza o consecuencia del cambio de tiempo. En fin:

El viernes estaba (con muchísima gente, ese “todos” tan frecuente y desconcertante de los sueños) en un enorme anfiteatro que daba al mar; situado en un pueblo costero, supongo que español. El anfiteatro parecía más una presa de contención o una mitad de coliseo, puesto que no había escenario en frente. Estaba abarrotado y era por la tarde. No sé qué diablos hacíamos allí; el entorno sonaba a pasado próximo y parecía una visita escolar. Fui al baño y cuando volví, todos habían marchado al centro del pueblo a ver fuegos artificiales (reminisciencias 5 de noviembre). Me dirigí para allá y me encontré a X. Quería hablar con él así que me pareció obvio decírselo. Llevaba un bote de Nesquik y una fregona. Nos colamos en una casa que había en un lateral del anfiteatro. Se quedó en el salón y yo fui al baño porque estaba comiendo y no me apetecía hablar como un cerdo. Intenté lavarme los dientes pero dos de ellos (los incisivos) estaban cubiertos de encía, así que tuve que rasgar y se me hicieron trizas y sangré como un niño pequeño pero al final acabé limpio. Salí al salón y X estaba fregando el suelo porque se le había caído un poco de Nesquik. A mí me parecía sólo una excusa para no hablar. En fin, como había trabajado este verano podía ayudarle. Comenzamos a fregar las paredes y hablar de tonterías (le dije que trabajé por un sitio por el que paseamos hace tiempo, y dime tú qué hacía X en Londres). Volví al baño a hacer pis. Tenía (el baño) forma de ele gorda: al entrar encontrabas el lavabo a tu izquierda y el retrete a la derecha; al doblar la esquina (perpendicular al retrete) había unas toallas, y al fondo de esa ala la bañera. En fin, estaba meando y de repente veo cómo se agitan las toallas. Voy hacia el lavabo y noto cómo alguien está escondido detrás de ellas. Me despierto del sueño con una sensación muy rara: como si ese detalle hubiera escapado de mi inconsciente. Como si no fuera mío, vamos. No tenía sentido.

El de esta noche me gusta más. Creo que tiene que ver con El cartero siempre llama dos vecesy la visita de Obama a Indonesia. Resulta que viajaba en el tiempo a un momento concreto: dos jóvenes, chico y chica, estaban tumbados en la orilla de la playa de noche. Las olas comenzaron a agrandarse y la marea subió: era un tsunami recién empezando. La chica, en vez de levantarse, pidió al chico que por favor se quedara con ella ahí. Ambos siguieron tumbados, arrastrándose por las olas e intentando sobrevivir. Cuando la situación se hizo insostenible (me encanta esta frase), yo intervine y ayudé (aunque supuestamente no pudieran verme) y por fin pudimos salir; pero fue horrible y nos costó muchísimo, pensé que iban a morir. La chica era mi madre. El chico debía ser mi padre, pero no le reconocía. Creo que fue una prueba de amor. Luego me trasladé a un nuevo colegio y no ocurrió nada del otro mundo, salvo algo bastante gracioso que ya contaré a Laura cuando la vea. Los baños daban asco y todo era rústico. Antes de eso hay algo más, algo genial y maravilloso que ya no puedo recordar. Sólo pienso en una casa vieja en un pueblo rodeada de árboles y olor a invierno. 7 de noviembre.

14

 

Me he levantado con el cielo gris. Los cielos grises son preciosos. Me suelen revitalizar y hacerme feliz; es como si no esperaran nada de mí. Cuando el cielo está despejado y hasta el sol sale parece que debemos sonreír y me agobia. Ahora el cielo está gris y los colores de los edificios contrastan más. Mediados de noviembre. Hoy es el cumple de Bea. El año pasado hablaba aquí de los cumpleaños de Gabi y de Bea y parece que fue ayer. En todos los sentidos. Estar entre cuatro paredes me va a acabar matando. Hoy he soñado que me transladaba a una universidad bastante extraña en la cima de un conjunto de colinas que bordeaban la costa atlántica; y desde arriba había enormes acantilados que se unían al mar por estuarios y rías y todo era gigantesco y sublime y soplaba el viento que olía a océano. Fellini consiguió bien describir los sueños. Recuerdo que nunca encontraba mi clase y que casi siempre acababa en el acantilado, andando lenta y fatigosamente. Todo era peligroso pero tan bonito. Luego estábamos en una especie de San Rafael con un chico y una chica que ni existen y que al parecer eran nuestros amigos. Yo le decía a él que me recordaba a mí mismo con Cris hace dos años (la chica también se llamaba Cris). El chico hasta lloraba de la risa con ella. Vinieron a hacerle una entrevista a Elena para una academia de inglés y salió una chica en bata. Luego había un asesino que hacía el amor con una modelo que sacaba los ojos a sus compañeras mientras dormían para que sólo ella captara la fama. Ambos participaban en una película pasional que se rodaba en una capital ex-soviética donde todos los edificios eran modernos y tenían cristales; y había estatuas y árboles y huelgas y coches. En la universidad del Atlántico, cuando corría hacia mi clase porque me perseguía un maníaco sexual (casi me mata pero se me olvidó comentarlo arriba), crucé un parque cubierto por estudiantes fumando y hablando de lo que sea que estuvieran hablando y me tropecé y toqué tu mano y me ayudaste a levantar. Ni siquiera existes, pero me gustó. Putos domingos. Debería hacer cosas y me dedico a recordar momentos oníricos y a pensar en gilipolleces.

24

Hoy en el gimnasio he recordado de repente lo que soñé, a propósito de lo que escribió Inma en el fotolog (cosa rara). Y, como cualquier recuerdo onírico posterior al despertar, sólo soy capaz de concebir la sensación. Resulta que era mayor y tenía mi vida y mi bagaje culturalsexual etc., y de repente, en un momento determinado, recordaba mi juventud (o sea, ahora) y me entraba muchísima nostalgia. Tampoco es que me deprimiera al pensar que ya no era joven; simplemente echaba de menos por un momento esta extraña libertad, mezcla entre inconsciencia e impaciencia. Me ha gustado. También me ha gustado la biblioteca central, aunque tantos libros me han puesto nervioso. Aun así iré allí a estudiar algún día. Quizá me mude de aquí. Poco a poco.

Me ha encantado Harry Potter. Lloré como un idiota cuando Shacklebolt y Lupin se enfrentan al llegar a la Madriguera para asegurar sus verdaderas identidades ante la existencia de un traidor, preguntando KInglsey que cúales eran las últimas palabras que Dumbledore les dijo antes de morir (“Harry es nuestra única esperanza”). Echo de menos a Sara y me habría encantado que la hubiéramos visto los cinco. En fin. [Thinkgreeen el 24/11/2010 Pues hagámoslo, jo..]

26

Dormir se está convirtiendo en lo mejor de mi vida. Ay. Puede sonar triste pero dos cojones. Mis sueños son jodidamente interesantes. Cuando me levanto a beber agua o a lo que sea sólo tengo en mente VUELVE A DORMIR para poder continuar.

Ayer fue algo de lo más raro: conocía, gracias a mi madre, a los escritores de Anna Karénina; una pareja de 65 o así (muy bien conservados, creo que se hicieron la cirujía) que escribieron la novela en los años 60. Yo estaba muy impresionado y decepcionado, vamos: ¿cómo podían escribir mil páginas tan jodidamente decimonónicas en los años 60? Me sentía timado. Pero los escritores eran simpáticos y tenían pinta de sabios. Pusieron “Tolstoi” como firma porque así se llamaba su viejo vecino. En fin, hoy he soñado TRES cosas (en once horas xD), cada una igual de apasionante. Apenas me acuerdo, claro. En una de ellas, aun así, viajaba a un campamento enorme (parecía el colegio donde Laura le dijo a Victor que no le correspondía) con mis amigos y aparecía más gente (a la que también conocía, al parecer). Ese primer día todo el mundo jugaba a deportes, y yo estaba fumado y no paraban de lanzarme pelotas y mierdas y yo las devolvía a donde podía. No paraba de reírme como un subnormal. Al ducharse se necesitaba de un LIBRO, al igual que en nuestra lógica se necesita de una toalla para secarse. Yo sólo tenía un libro de ilustraciones y pensé que no servía, pero sí lo hacía (y cuando me di cuenta, me reí también). Me encantan los cambios de lógica en los sueños. Son increíbles.

Del segundo apenas me acuerdo aunque creo que algo nos perseguía o que alguien tenía poderes; y recuerdo que caminábamos por un camino. El tercero era largo y complejo y apenas recuerdo detalles, pero mi padre, mi hermano y mi tía (que ninguno de ellos existe, claro) tenían una enfermedad parecida a la tuberculosis aunque mortal, y por mucho que tomaran medicamentos (alguna droga, creo que barbitúricos) iban a morir igual. No sé si a mi padre le hice yo morir a propósito y luego igual a mi hermano (creo que eran asesinos). En realidad no sé si yo pertenecía al sueño, porque no era de terror. Mi punto de vista era distante y FUERTE. Recuerdo acompañar a Mariluz y Paula a coger un autobús en coche mientras esperaban Laura Albaladejo y no sé quién más a pedir en la barra de un bar. Creo que al final yo también acababa muriendo de esa extraña enfermedad familiar: a la puerta de mi casa, cerrada por el resto de mi familia, tosiendo sangre como un loco bajo la luna llena.

Era bonito.

 

27

Hoy es el cumpleaños de esta monada que sale en la foto. De verdad, es una monada. Como un peluchito. Tengo muchas clases de amigas, claro, y Laura pertenece al grupo “monadas”, con Flu y Gata. Laura es la monada suave. Tiene ojos de pajarito y voz de niño gordo con gafas. Antes llevaba una trenza y se la cortó por algún tipo de razón. Cuando la conocí por primera vez, me dijo que yo era muy “setheniano”. No tiene nada que ver con la imagen actual que tengo de ella. Duerme con las gafas (o al menos se ducha con ellas) porque tiene como 13 de miopía. Cuando quiere decir muchas cosas a la vez se traba y pierde la paciencia. A veces se pone a reír, o dice “jo Daniel” o agacha la cabeza. Casi nunca se deja hacer fotos. Cuando conoció a Mariluz y Paula, en mi terraza, se escondió porque estaba fumando un porro y le daba vergüenza que vieran cómo lo hacía. Siempre compra tabaco aunque fume poquito. En Lisboa, mientras Mariluz testaba la experimentación húngara, Laura y yo hablábamos de nuestras vidas perras mientras fumábamos Lucky comprado por monedas que encontramos en una silla de una discoteca hortera frente al Estuario. Estaba muerto de hambre pero se me pasó. A veces, Laura se pone a cantar. Acompaña el canto con movimientos sigilosos y palmas. Es una monada. Una verdadera monada. Me recuerda a algo blandito que emite sonidos dulces e inocentes. Pero no sólo es suave. Es como un cervatillo atrapado por una trampa. La está matando pero no sabe qué hacer. Necesita que alguien se la quite. El problema es que nadie pasea por el bosque. Seguro que si alguien pasara, hasta lloraría de la pena que el cervatillo da. Pero siempre acaba pasando alguien. ¡Siempre!

Diciembre

5

Mi madre quemaba hojas en una maceta y el cielo estaba gris. Siempre acabo en ese espacio… he llegado a la conclusión de que todo es lo mismo. Desde la playa hasta el campamento, todo está igual: abandonado, destrozado, bajo nubes negras y chillidos de fuego. Y nosotros corremos, corremos sin saber a dónde: simplemente avanzando, escapando de lo que sea que nos persigue. A veces nos detenemos en un sitio concreto y ocurren cosas. Laura murió. Inma se suicidó tirándose por una ventana. Pero nosotros debemos seguir avanzando. Sólo hay jóvenes que huyen, se pelean, roban, matan. Yo tampoco estoy muy nervioso. He llegado a aceptar la situación, y me consuelo con mantener a los que están conmigo a salvo (por eso que murieran me turbó). Y al despertar hay una humareda enorme en la terraza y mi madre mete papeles en una gran maceta que arde y arde. El humo contrasta con el gris del cielo: niebla que abraza todo como un manto. A veces siento claustrofobia sólo con mirar hacia arriba y ver nubes. Entonces hasta mi nenúfar se apiada y deja de quejarse. Nos abrazamos, aquí dentro, y me acaricia con sus hojas. Luego se acaba y volvemos a lo mismo.

Tengo ganas de algunas cosas: hablar con Leilani (¡hablar! En inglés o en español, pero poder hablar de verdad), ver a mi hermana, tocar la arena de la playa. Queda tan poco que me sorprende. El 2010 se va. Empezó ayer con Inma (y su voz resacosa) diciéndome a la hora de comer que sería nuestro año. Al menos, se cumplió a medias. Supongo que basta. [L_artpourl_art el 08/12/2010: Supongo que cuatro meses de un año no está mal y el 2012 será el tuyo así que no te preocupes. El 11 no estará mal. Es como 11, hemos sobrevivido al 10. A mí no me apetece que se acabe y no quiero suicidarme, pero como esas cosas no se planean, si algún día pasa no te sientas culpable y piensa que me mantuviste muchas veces a salvo. A ver si te veo el viernes]

18

Hoy he soñado cosas. Me he levantado lleno de energía onírica.

La primera parte ha sido bastante traumática. Había una especie de reunión multitudinaria de estudiantes de todos los países del mundo. Puede que se integre dentro de Paisajes Apocalípticos (otros espacios oníricos pertenecen a este lugar) o a la U.C., sitio del que hablaré luego. En fin, hacía buen tiempo y estábamos en la ladera de una montaña que se bañaba en las aguas de un gran río. La gente hablaba y reía y se metía en el agua. Entre la multitud, un puñado de chavales rubios y algo pálidos (creo que eran de Suecia) se dedicaban a corretear con unas pistolas láser que emanaban un brillo de diferentes colores hacia los ojos de los demás. Al cabo de un rato el pánico comenzó a desatarse entre algunas grupos: había personas que desaparecían, normalmente después de ser señaladas con las pistolas. Nadie parecía darse cuenta. Yo comencé a entender lo que estaba pasando; observaba cómo los colores cambiaban según la nacionalidad de las personas. Los chicos, altos y fuertes y con las típicas caras de sociópatas de los niños ricos con más dinero en la cartera que neuronas en el cerebro, jugaban a cazar extranjeros. Según la nacionalidad, ganaban más o menos puntos. Después, cuando los habían marcado con la pistola, los asesinaban. La luz para los españoles era roja. Uno de ellos intentó apuntarme, pero yo me tapé los ojos y forcejeamos hasta que al final lo consiguió. Mariluz y Virginia no me tomaban en serio; decían que estaba siendo demasiado paranoico, que no había por qué preocuparse, que sólo estaban jugando. En cambio, Álvaro, Inma y Paula estaban más dispuestos a creerme. Aun así les convencí a todos y nos dirigimos a una pequeña torre blanca alejada del grupo. De inmediato, vimos a unos cuantos rubios asesinos dirigirse hacia nosotros. Venían a por mí. Creo que después de eso, Álvaro, Inma y Paula desaparecieron (no sé si se acobardaron o discutieron conmigo xD) y Mariluz y Virginia, que habían dudado de mí, me apremiaron para que nos escondiéramos en la torre. Subimos las escaleras y ellos iban detrás de nosotros. Teniendo a Mariluz y a Vir delante de mí, y a ellos a pocos escalones, no se me ocurrió otra cosa que pararme, coger un extintor y amenazar al primer sueco que había. Se rió y no me tomó en serio, así que se lo tiré al a cabeza y se calló por la ventana. Las paredes de la escalera de caracol tenían bastantes extintores, así que al final conseguí espantarles a todos y sobrevivir. Me sorprendió bastante.

Este sueño tiene relación con varias cosas: la influencia de Hostel, temática con la que ya he soñado más veces, es notable. Además, ayer vi en un bar que en la TV ponían La venganza de los Sith; de ahí quizá las pistolas con láser.

Después la acción cambió y se localizó en una universidad algo antigua en medio del campo que se llamaba Universidad de Carly, o Así Carly, o algo relacionado con Carly. Carly no estaba ahí, pero al parecer fue modelo de referencia o fundadora o algo y su nombre se quedó en la institución. Estaba orientado, especialmente, a estudiantes estadounidenses. Pasaban cosas sin importancia relacionadas con el transporte en autobús hacia allí y la cocina y el salón. Una chica dormía pegada a la pared de la cocina, y recuerdo que tenía que subir una escalera que estaba justo cubriendo su cama para pasar a una habitación donde un chico dormía (me mandaban decirle algo y tenía que hacerlo, pero por propio interés). Al final, obviando que me he saltado una segunda parte por autocensura, me dirigí a una habitación. La ducha estaba abierta y todo el suelo aparecía prácticamente inundado. Llamaron a la puerta y apareció uno de los conserjes, un egipcio calvo con lengua de serpiente, que avisó a la policiía y nos acusó de haber vaciado el depósito de aire abriendo la ducha tanto tiempo. Yo no entendía qué cojones significaba eso cuando todo el suelo estaba inundado. Pensé que ése sería el problema. Aun así, cuando la policía llegó, casualmente pillaron a unos estudiantes que trafiqueaban y delinquían, algo así como la mafia en el campus, por lo que el decano decretó día de supermercado gratis y toda la universidad se llenó de estantes de los que la gente podía coger cualquier cosa. Al día siguiente nos volvimos a Madrid. Bea casi no me dejó montarme en su coche, que conducía Leilani.

En la UCLA, un supermercado se habilita exclusivamente para los estudiantes un día concreto. Supongo que de ahí habré sacado lo del supermercado. Ay, me lo he pasado muy bien durmiendo.

22

Lapsus de dos semanas para intentar ser feliz al otro lado del océano. Hoy ha sido una noche entrañable: nosotros, con nosotros, entre nosotros. Poco posible decir más. Elena dijo:

“Esta es la historia de 12 vidas y sus factoriales personalidades escondidas (psicopatía ! ). De algún modo extraño se juntaron, vaya usté a saber por qué razón. Una se creía novia de quarterback y acabó llevando coleópteros de excursión a Cortylandia. Otro, que iba para gordo con monóculo, terminará paseando desnudo en bicicleta defendiendo los derechos de las pipas de kiwi. Una prometedora Kournikova ha acabado por conseguir que el tiempo no pase por ella, o pase demasiado. Y múltiples huecos capilares afectaron a otra, hasta que se largó a crear pelli genéticamente modificados que obedecen órdenes de “sienta”, “hazte el muerto”, “dame la patita” y “¡mátalo!”. Mamá es mamá drogada, aunque cada vez se permite menos lujos, porque los años no pasan en balde. Y a un(a) neóptero con pelos y sin alas cada vez le va más el rollo mosca. De barbilampiño, otro, pasó a ser lo opuesto a Mahatma y a predicar la guerra amorosa y susia por culpa de unos campesinos que huyen y un “oh, maestro”. La guitarra con pies habla con la cabeza y en el fondo lo que le gusta es Camarón, por eso mira mal a otros acordes porque son más acordes que ella. Tenemos también vidas reencarnadas pero que parece que esta vez es la definitiva, porque no hay contratiempo que desvanezca tanto poderío y tantA carisma como tiene un par de quemazones y un moretón gigante. De bichos anda la cosa, pero el bicho real acaba siendo menos bicho, y sólo en algunas tomas se cree moUUnstrUo. Y por último, pero no menos importante, un híbrido de varias cosas (¿) con lente, rosebud, ex-melena reconvertida pero desterrada y su inseparable amiga M.

Además, a todo esto se le une algo venido de cerca del trópico dibujado con línea discontinua (que se puede adelantar, y bien que se adelanta), que dijo querer participar de la orgía emocional.”

Feliz Navidad [sic].

 

31

Empieza algo y termina una etapa. Lo noto. No para de llover y estoy triste, como si me despidiera. En realidad termina el año y terminan muchas más cosas. Lo [a]noto. Terminan y empiezan. Termina lo mío, lo antiguo, lo de siempre. Tenía que terminar alguna vez, pero aun así sorprende por lo volátil del cambio. Ya dije que fue ayer cuando Inma me dijo que este, el 2010, sería su año. Quizá el 2011 también sea el mío. Pero que sea el mío, MI año, quiere decir que muchas otras cosas se excluyen. Es extraño. Me toca un año más largo, más viejo. Fumaré el último cigarro y el aire vendrá cargado de gritos y risas forzadas de más de medio mundo.

Feliz año nuevo.

 

 

Extractos de “Fotolog 2009”

Enero

1

El sueño de la razón produce monstruos.

Horario de estudiante. Estudiante trabajador que estudia traba[ja]ndo [de estudiante] y vive (sólo). Creo que me estoy volviendo loco. Más, sí. Pero qué mejor forma de empezar el año que exponiéndose al PELIGRO del desconocimiento. Tengo hambre y es día dos.

7

¿Quién eres tú? -preguntó el principito-. ¡Qué bonito eres! -Soy un zorro -dijo el zorro. -Ven a jugar conmigo -le propuso el principito-, ¡estoy tan triste! -No puedo jugar contigo -dijo el zorro-, no estoy domesticado. -¡Ah, perdón! -dijo el principito.

Pero después de una breve reflexión, añadió: -¿Qué significa “domesticar”? -Tú no eres de aquí -dijo el zorro- ¿qué buscas? -Busco a los hombres -le respondió el principito-. ¿Qué significa “domesticar”? -Los hombres -dijo el zorro- tienen escopetas y cazan. ¡Es muy molesto! Pero también crían gallinas. Es lo único que les interesa. ¿Tú buscas gallinas?

-No -díjo el principito-. Busco amigos. ¿Qué significa “domesticar”? -volvió a preguntar el principito. -Es una cosa ya olvidada -dijo el zorro-, significa “crear lazos… ” -¿Crear lazos? -Efectivamente, verás -dijo el zorro-. Tú no eres para mí todavía más que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos. Y no te necesito. Tampoco tú tienes necesidad de mí. No soy para ti más que un zorro entre otros cien mil zorros semejantes. Pero si me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo…

Adiós, hermana perruna. 

16

Todo es un esperpento. Qué amigos y qué futuro. Cuando me duele la garganta tiendo a pensar que poseo uno de estos bichos que se comían a la gente en La Momia. Abandonaré a Prim. O no; escribir pseudo-historias es más divertido, pero mis ojos tienen corcho en el borde y exigen que me acueste. Pero qué le voy a hacer, tengo una concepción de la belleza singular y selectiva.

Y si me aceptan, me iré. O no, pero, ¿y si…? Recuerden a T&T: no hay repetición en esta dimensión. Todo lo que uno hace es lo correcto porque una valoración moral como es “correcto” necesita de dos partes. La parte que has hecho es la única que existe; la otra nunca ocurrió ni nunca ocurrirá. Estamos condicionados a hacer todo correcto porque sólo podemos hacerlo todo; nuestro camino está hecho a base de baches que muerden como Wilson.

21

Si LSE me acepta, soy feliz. Y si me toca la lotería también. En fin, he empezado “vidra”. Ignoro el alcance y/o limitaciones, pero espero que sirva para algo. ¡Tengo una ley a la que ceñirme! Si va para más, mejor.

While we’re on the subject

Could we change the subject now?

I was knocking on your ear’s door

but you were always out

24

Hoy he soñado que estaba en Edimburgo. Porque huíamos y el metro nos llevaba para allá, pero todo estaba cambiado. Había una cascada enorme que desembocaba en un río en vez de los raíles del tren y todo era más estrecho, como más íntimo. Antes de eso estuve patinando por laberintos con bicéfalos y reminiscencias. Malditas reminiscencias.

Esto no es suficiente.

Febrero es 02, pero normalmente se presenta como una mierda. Porque dura poco, está lleno de exámenes y encima cubierto de pseudo-nieve que durará días y hará 1. que mis converse envejezcan prematuramente. 2. que el suelo de Madrid se salinice AÚN más. Así que genial, viva la nieve, sí. Nieve de los cojones. Muy bonita será desde dentro, pero no puedo ni salir a patinar, ni salir a correr ni salir a salir. Y Special K vuelve para desintoxicarme y evitar que pierda los últimos resquicios de mi deterioriada memoria. Si vuelvo a acordarme de la ropa que llevaba el día anterior consideraré que empiezo un buen camino.

Qué día ayer. Febrero. A ver.

Meet you downstairs in the bar and hurt

Your rolled up sleeves in your skull t-shirt

/ We live a dying dream.

Tengo hambre y una cierta sensación de auto-satisfacción. Creo que estoy envejeciendo; quiero seguir sintiéndome frustrado a secas. Si además de eso mantengo un orden, me convierto en s-o-s-o. Eso es como decir vulgar, y mi atisbo de espíritu elitista grita y se retuerce. En fin.

Febrero

6

No trabaje en cosas de la muerte.

No trabaje en productos farmacéuticos.

No sea emigrante.

No sea alemán, sobre todo recién llegado.

No sea rumano.

No sea japonés.

No viva donde no haya sol.

No sea adolescente y homosexual: uno de cada tres lo intentará.

No sea nonagenario en Los Angeles.

No sea alcohólico.

El alcoholismo no es más que un suicido a plazos.

No sea esquizofrénico.

Desobedezca a esas voces que oye en su cabeza.

No se deprima. Anímese.

No sea Jennifer Rockwell.

Y no sea hombre.

Sobre todo, sea lo que sea, no sea hombre.

(Martin Amis)

No quiero ir a pensar si no quiero ir. No quiero pensar. Parar de pensar.

Alicia, o La vida es sueño, o esto.

Y te preguntas si será verdad, si serán reminiscencias de un futuro próximo que fue sentido por potenciales. Pero vivir de un anhelo es tan peligroso. E inútil, claro.

Nada importa salvo lo que importa. Nada más.

He corregido Historia. Lo que quiere decir que sólo tendré que corregirlo otras DOS veces porque me falta el método aquí y la madre de Peter allá. Pero lo he hecho. Antes de tiempo. Me siento entre orgulloso e idiota porque debería de haber ido al cine pero soy un peligroso… ¿cómo era? No voy a poder hacer Medicina si no me acuerdo de estas cosas… bueno, soy un puto transmisor de enfermedades u_u. Pobre Lidia. Pobre Bea. Tratad bien a mis virus.

Y bah, odio la Universidad, odio el Bachillerato. Voy a acabar haciendo Física o Filología Árabe. Pero nada de Sociales, por favor. Nunca más; eso no se estudia, se hace y se es.

‘Why did you fuck him?’ ‘I wanted to.’ ‘ Why?’ ‘I desired him.’ ‘Why?’ ‘ You weren’t there!’

15

Losing hope is easy. A veces me encantaría estar una semana entera sin dormir. Porque:

1. Tendría tiempo teórico para hacer todo aquello que debo hacer y que no hago porque es de día y yo soy yo. 2. No tendría que esperar a que mi conciencia decidiera dormir. 3. Conocería más la noche. 4. No soñaría absolutamente nada y por lo tanto mi inconsciente no simularía situaciones de terror/premonitorias/auto-didácticas que suelen joderme la cabeza.

Pero la semana terminaría y la cama me echaría de menos. Seguro. 15. 02. 09. Domingo. Perfecta combinación.

17

Esta materia no es mía. Mi entendimiento quiere individualizarse y asesinar al entorno.

Hay personas que no saben estremecerse ante una ráfaga de viento que sugiera primavera o no saben construir a base de la contemplación de una mano. Luego hay otras que buscan más, y otras que no buscan nada.

21

“Lo más destacado de la política de Reagan fue la Iniciativa de Defensa Estratégica (IDE o SDI en sus siglas en inglés). Consistía en el desarrollo de un sistema defensivo de misiles antibalísticos mediante la interceptación de los misiles enemigos en la mitad de su curso, a gran altura sobre la tierra. Para el cual era necesario el empleo de sofisticadas tecnologías armamentísticas, algunas aún en etapa de desarollo o inexistentes. El sistema debía incluir proyectiles con base en la tierra y en el espacio, guiados mediante computadoras; radiaciones de partículas subatómicas y láser nucleares de rayos X, disparados desde cañones sobre raíles electromagnéticos; todo bajo el control de un sistema supercomputerizado.”

Es entonces cuando, después de su debido WTF, reafirmo mi indecisión sobre la Historia. Y frente a una repulsión consolidada, aparece un débil “I love you, bastard” que no deja de sorprenderme. Al igual que todo aquello esperanzador que, aun habiendo finalizado en decepción, se sigue estudiando. La Historia es un cuento de guerras por poderosos y de fracasos por soñadores.

La Guerra de las Galaxias.

23

Nobody ever had a dream round here,

but I don’t really mind that it’s starting to get to me.

Me sabe todo a mojado y me huele el metro a laguna. Estoy empezando a odiar el transporte público. Y las cargas, y el egocentrismo, y la hipocresía y la no-hipocresía. En la práctica la gente no acaba pensando. Son miradas arbitrarias y arbitario es el propio criterio de interpretación.

No espero el fin de exámenes, ni el verano, ni la carrera. Espero ir al cine una tarde lluviosa o sentirme protegido por gente a la que quiero protegiéndome. Que me protejan otros es como si me atacasen. En todos los sentidos.

23 de febrero. Qué daño hizo la verborrea decimonónica que acompañaba a los pronunciamientos.

27

Nivel de alerta: 4,3 -> Preocupante-estrés +i. Mal no. Lo siguiente. Trabajos, familia, trabajos, futuro. Y febrero termina TAN decepcionante. Pero vidra me ayuda a organizarme y a ser consciente de que respirar es bueno. ¡Sí!

La superficie comienza a esclarecerse. A aparecer sin necesidad de más luz; aparentemente, la situación es comprensible. Los fluídos encuentran su cauce, y este proceso cíclico e ilusorio acaba cansando. Hace un día increíble. Parece que el cielo caerá sobre mi ventana.

Did you say ‘no, this can’t happen to me,’

And did you rush to the phone to call

Was there a voice unkind in the back of your mind

Saying maybe you didn’t know him at all

You didn’t know him at all, oh, you didn’t know

Marzo

4

Marzo=fin=bien. Una araña inmensa hace a la luna estrella. Los días de primavera provocan un efecto interesante en mí. Recuerdo cosas desde fuera, como si lo sucedido perteneciera a una película. La agitación de miles de grillos reclamando un reconocimiento, atrapados por el CALOR, la fuerza intrínseca y suprema; y yo, mirando con recelo el lugar de ataque abandonado donde crecí a base de ruidos sordos; levantándome, buscando a tientas en el armario. Escribiendo. Escribiendo gilipolleces que sólo ayudaron a afirmar lo que nunca tendría que haber ocurrido.

Pero está fuera, pertenece a los recuerdos de otra persona. Yo sólo miro hacia el sol sin lupa porque sé que Júpiter tiene hidrógeno líquido y me preguntó a qué diablos debe saber eso.

Quiero ser el Sr. Smith y recorrer el mundo interpretando La cantante calva. Porque es lo que necesito.

9

Qué dirían Leonor o JW ante tantas guerras sacarían su mano por la ventana saludando a la bandera? lo dudo más bien mirarían hacia el techo desde la cama después de doce horas de trabajo las oportunidades escasearían para espíritus puros o bien dejarian de ser tan puros y sus vidas avanzarían con las guerras y sacarían sus manos por la ventana saludando a la bandera Janey es coherente Janey sabe qué hay y qué no hay Janey no es judía ni socialista Janey vio morir al único chico que amaba con 13 años Janey no se preocupa por saber si ese criterio es innato o no quizás sea porque todavía no ha tenido tiempo para poder pensar

Dos Passos. Como dos enormes pasos en mi conciencia. Avanza, avanza. El destino es múltiple y no es; sólo avanza. Los hombres calvos y pre-seniles con mirada catedrática no impresionan; quiero juicios de MAGIA y trascendencia; quiero NO- LÍMITES.

Sentimiento creciente de incomodidad por falta de hábito.

22 horas sin parar para reafirmarlo.

No existe. Existe la resignación, que al negar una parte importante de ti mismo acaba haciéndola desaparecer, por lo que no es un problema y en sí puedes pensar oh lo soy. Pero desaparecer no es lo mismo que dejar de existir. Simplemente se esconde.

No me apetece jugar a esconder cosas.

20

Puente insulso. Bueno, medio-viernes insulso. Ayer, volviendo a las 5 (¿por qué siempre volveré a las 5?) me di cuenta de que 1. la mayoría de los chicos baila mal. 2. la mitad (del total) no sabe afeitarse bien.

Creo que es algo significativo. Y también me di cuenta de que 1. las chicas maquilladas parecen travestis 2. la mitad de las chicas maquilladas son travestis.

Creo que estas cuatro conclusiones (sacadas a la marcha, tenía que ser sincero) son lo más interesante que me ha ocurrido en marzo. Además de encontrarme con ____ y sentirme bien, pero las sensaciones me caen mal y ya no las tomo en cuenta.

30

Lorca me entristece. Me recuerda a Edimburgo y a unos pantalones negros que tenía. Y a mis antiguas converse. Ahora sólo me queda una; creo que la otra se la comió mi madre.

Horizonte

Sobre la verde bruma se cae un sol sin rayos.

La ribera sombría sueña al par que la barca y la esquila inevitable traba la melancolía.

En mi alma de ayer suena un tamborcillo de plata.

(Lorca)

Estos putos días de febrero.

31

The sky is full of dreams but you don’t know how to fly.

Ahí fue cuando decidí que necesitaba descubrir un lugar mágico. Fue el 11 de julio. Continuaba en antiguas obsesiones y el tiempo parecía no avanzar. Yo tomé la decisión de avanzar solo y abril es un mes horrible. Siempre acabo diciendo lo que no tengo que decir.

Ah, y Atonement me desestabiliza. Hace que vuelvan antiguos fantasmas a mis sueños y esto me provoca AGOTAMIENTO. Estoy cansado de soñar gilipolleces realistas que 1. no van a ocurrir 2. aunque ocurrieran nada cambiaría. Es como una constante burla. Y no me hacen extrañar nada salvo algún olor o unas manos. A la mierda. Hoy quiero respirar aire de ciudad y pensar en la futura inactividad de semana santa con optimismo. Porque lo que me espera…

Abril

4

Os quiero. Ha sido como revivir 0509, guardando las distancias y eso. Tengo la garganta destrozada y he soñado cosas horribles pero guardo recuerdos de ayer. ANDAR, el frío, Infinity xd.

Hoy comienza la libertad. Y yo os convoco.

ps. la verdad es que ha sido un sueño impresionante. Pero recordar lo que no debe ser recordado duele y la he abrazado. Parecía que ambos sabíamos que se iba a ir. Era su olor, su tacto y fin porque mi cerebro sólo se permite 2 minutos.

5

Para empezar, estoy iniciándome en eso de prescindir de las mañanas. Me levanto con la comida, y obviamente creo un híbrido alimenticio que me hace aguantar. Ayer fue AGOTADOR. Me duelen el tronco, los brazos, la espalda, LAS PIERNAS. Andamos desde Cuatro Caminos hasta Banco de España. Y dormí. Soñé con gazpacho y con visitas inoportunas (qué coincidencia, también xd); pero fue genial.Mañana FIN. Tengo que volver a la rutina. El imperativo de la hoja colgada de mi repisa azul con mis librospelículas (faltan algunos, eh) lo dice: HAZ ALGO.Atonement fue increíble. Increíble, sí. No es un adjetivo que se utilice a la ligera. Hace día de verano y mi casa huele a jazmín y a alcohol. Las avispas andan a sus anchas por mi terraza pero me da igual. Chan chun chan.cto y fin porque mi cerebro sólo se permite 2 minutos.

9

Ya desde su nacimiento el agua comenzó a descender, casi por inercia, hacia la inmensidad que continuaba y daba fin a su esencia. Había tramos en los que descendía con fuerza o se acumulaba artificialmente para luego volver a la misma frecuencia con que se originió hasta difuminarse en el mar. Sus peculiares duraciones marcaron las pautas.

Hace un año, el agua se desbordó como nunca antes lo había hecho.

Hoy he soñado con una ciudad europea y húmeda. No puedo esperar.

I guess I could be pretty pissed off about what happened to me… but it’s hard to stay mad, when there’s so much beauty in the world. Sometimes I feel like I’m seeing it all at once, and it’s too much, my heart fills up like a balloon that’s about to burst…

…and then I remember to relax, and stop trying to hold on to it, and then it flows through me like rain and I can’t feel anything but gratitude for every single moment of my stupid little life…

You have no idea what I’m talking about, I’m sure. But don’t worry…

You will someday.

(American Beauty)

11

Leer mucho/leer seguido acaba trastornando a uno. Y escribo trastornar en vez de transtornar porque tres consonantes seguidas en español es “inadecuado”. Dicen inadecuado y no incorrecto. Casi podrían decir antiestético. Así se guían las normas lingüisticas, para qué si no tenemos una hache. Helado. Elado. Elado suena a rey visigodo. Trastorna porque permite la autovisualización exterior, es decir, abstracción de uno mismo y contemplación. Con un determinado tipo de atmósfera y sus consecuentes metáforas, claro, pero es algo significativo.

Me hizo gracia saber que ya había hablado de mi pseudo-don para conocer ánimos a través de expresiones faciales. Hasta estaba mejor explicado. Me asusta pensar que soy tan invariable. Y aceptar ciertos ¿fracasos? como el fin de tardes mágicas (y sus finales: noches frías y ketchup en el suelo del 64…), el fin de sentimientos mágicos. El fin de lo novedoso. Para variar, las dos opciones no son un enigma. O mantener lo arreglado, o arreglar lo mantenido. Hay ciertas cosas que se eliminan al ser arregladas. Ehem, sobre arreglar:

Reducir o sujetar a regla; ajustar, conformar. U. t. c. prnl.

Ajustar (Hacer y poner algo de modo que case y venga justo con otra cosa) a regla es precisamente a lo que me refería, y sólo porque viene acompañado de REDUCIR, sin más; una aplicación que no responde a ninguna regla salvo a la voluntad del sujeto.

Let us die young or let us live forever

We don’t have the power but we never say never.

 

12

Cambiar de posición. De nuevo. Escuchando el ruido que provoca el inalterable silencio de la noche: los latidos del corazón al pegar la cabeza a la almohada; los ruidos de pasos en la calle. Los ruidos de voces. Las voces de tu propia conciencia.

Abrir los ojos y ver luces que han pasado inadvertidas; levantarme, cubrirlas. Volver a notar las arrugas de la colcha, el frío que entra por la ventana y el calor que aprisiona mis rodillas. De repente, notar la boca demasiado seca como para intentar dormir. Las voces nunca cesan. Son miles: cantan, gritan, lloran, ríen.

Me encantaría tener un puto interruptor para apagar mi conciencia. Y dormir, como por las mañanas; sin voces, sin calor, sin ninguna puta obsesión. Mientras tanto, pas-ti-llas.

Putas obsesiones. Mi cabeza es incapaz de librarse de esos interminables pensamientos que no hacen más que provocarme cefalea crónica. Impotencia.

Hay personas que se sienten inseguras; ven pasar frente a ellas miles de formas de actuar, miles de estereotipos deseables. Se ven incapaces de actualizarse y desarrollar su propia esencia, de elegir qué es lo adecuado. Se sienten ajenos a toda esa espiral, no pueden entenderla y por lo tanto, superarla. Así que adoptan máscaras. Creen que así estará solucionado el problema. Creen que nadie podrá descubrirles. Y en su actuación diaria, no reparan en lo que pueden perjudicar mostrándose como no son realmente.

Esas personas son tan decepcionantes como ingenuas. Toda actuación tiene un final. Los finales de actuaciones dramáticas y apasionadas son los peores.

Pero, ¿quién puede llegar a conocernos tal y como somos realmente?  [Alma_matisse el 13/04/2009 yo lo hago casi a diario u_u] De hecho… ¿cómo demonios somos nosotros mismos realmente? Creo que es algo que no podemos saber.

Odio las voces. Las odio con todas mis fuerzas, tampoco me dejan dormir. Estar en mi cabeza es como estar en un inmenso espacio cavernoso donde el eco es insoportable. Y cada vez hay más y más ruido que se repite y aumenta porque las voces no se callan. Jamás. Y siempre dicen cosas diferentes… más y más palabras que rebotan en las paredes de roca maciza y van de un lado a otro, y se suman a las nuevas, a las las antiguas… Es desquiciante. Así estoy yo como estoy (L).

IMPULSIVIDAD. Quiero ser capaz de ver dónde apoyaré el pie en el siguiente paso; y riéndome. Esto es un intento. Puede que el futuro me de esperanzas. También puede que la felicidad sólo se sustente en el amor y que haya, por tanto, una importante [in]capacidad. Pero la autorrealización motiva. Lo dijo Haslow xd y lo digo yo. Saber que estás haciendo algo útil. Tengo que reeler libros que contribuyen a mi enfermedad onírica y quedan 3 meses para volar.

Hoy es 17 de abril. En mi antiguo bicho [?] tendría una frase existencialmetafísica referente a algún suceso psicológico que pasó allá por el 2008. Me encanta mantener recuerdos abstractos. También lo hacía con los materiales pero acabé con los armarios llenos de play-mobiles sin peluca y pinceles rotos. Algunos me hacen recordar, hasta el olor es rememorable. Y hablando de Ortega, a mí también me ocurre eso de ir en coche por Herrera Oria (éste colaboró con la CEDA puaj) y ver todo con mis ojos de seis años. Las casas eran más grandes. Un poco más feas. Había más contaminación y las fronteras estaban demasiado marcadas.

Qué sensación tan agradable. La (tercera) luz de mi pared es como la luna de mi cama. Mi pobre cama sólo conoce esto; este cuarto, esta ventana, este cuerpo. Yo me aburriría. Y en general todos los objetos inanimados de aquí. Intento ser simpático con ellos y hasta me despido por las noches. Deben de sentirse solos cuando me voy. Y también molestos por mi falta de atenciones.

Pero ellos saben que les quiero.

What was love that truly desire

There is nothin’ that I really want

22

Últimamente estoy descubriendo realidades inesperadas, y más importantes que haber encontrado mi mechero azul. Lo tenía por perdido y lo encontré. Me he alegrado.

No. Cosas más serias, pero a la vez totalmente triviales a efectos aparentes. Y poco a poco me voy acostumbrando al olor de jazmín que impera por toda la casa. Hasta a mi cuarto han llegado flores. A lo mejor sirven para eliminar esos nenúfares, casi idealizados, que suelen aprisionar órganos vitales hasta acabar con cualquiera.

Necesito liberación. Y vivo en el pasado, pensé que era 21. He puesto en todos sitios 21. Le pregunté a mi profesora en el examen si era 21 y asintió con la cabeza. Los adultos andan hasta más perdidos, ¡y ni siquiera menopáusicos! Luego la Biología se atribuye el mérito. Já.

30

Hoy fue el último día de clases en mi instituto. El balance es hasta retórico.

-A dos personas no volveré a hablar nunca más.

-De otras dos, guardaré siempre un buen recuerdo.

-Dos se alejaron de mi vida.

-Otras dos ya forman parte de ella.

-Con dos mantuve buenas conversaciones.

-Dos me asombraron a más no poder.

-Dos me decepcionaron.

-Con dos me reí cuando más lo necesita.

-Otras dos intentaron comprenderme.

Dos años. Dos etapas, dos cursos, dos dos dos. Me quedo con todo y con nada y la anterior estructura, aparentemente ñoña y dual, se autoenriquece porque ni yo me acuerdo de quiénes son cada cuál. Bueno, miento; pero vosotros no.

Esto no es un puente. Nos han abandonado en el medio de la nada, sin más objeto que una pequeña embarcación de mierda. Entreguerras (AlemaniaFranciaReinoUnido), Totalitarismos (StalinHitlerMussoliniCastroMao), Guerra fría (T-O-D-O-+Guerrasárabe-israelíes), URSS, sur, norte 1945-1995. Más Matemáticas. Tres días. Y vosotras en Salamanca.

Abril me ha gustado. Sin más. Hasta me da vergüenza decirlo. Me da miedo pensar en que estoy tan cerca del fin. El fin de mi inicio como adolescente. El inicio de mi fin como joven. Pero bah, cada día me sostengo en categorías vitales diferentes.

 

Mayo

3 de mayo. Cuesta-final. Los mayos nunca suelen ser buenos… salvo para las revoluciones.

12

Todas las sensaciones acaban repitiéndose. Incluso las que parecen irrepetibles; las experiencias oníricas se encargan de suplirlo. Aunque no se recuerde, causan el mismo efecto. Calman el inconsciente.

Puede que calmar el inconsciente solo provoque la ausencia de confrontación instantánea. La prolongación de la espera.

Cuando entraron, la habitación estaba toda llena de una solemnidad lúgubre. Sobre la mesa de labor, cubierta con un mantel blanco, había cinco o seis bolas de algodón en una bandeja de plata, cerca de un crucifijo entre dos candelabros encendidos. Emma, con la cabeza reclinada sobre el pecho, abría desmesuradamente los párpados, y sus pobres manos se arrastraban bajo las sábanas, con ese gesto repelente y suave de los agonizantes, que parecen querer ya cubrirse con el sudario. Pálido como una estatua, y con los ojos rojos como brasas, Charles, sin llorar, se mantenía frente a ella, al pie de la cama, mientras que el sacerdote, apoyado sobre una rodilla, mascullaba palabras en voz baja.

(Madame Bovary)

15

Hace mucho tiempo que te fuiste, Susana. La Luz era igual entonces que ahora, no tan bermeja; pero era la misma pobre luz sin lumbre, envuelta en el paño blanco de la neblina que hay ahora. Era el mismo momento. Yo aquí, junto a la puerta mirando el amanecer y mirando cuando te ibas, siguiendo el camino del cielo; por donde el cielo comenzaba a abrirse en luces, alejándote, cada vez más desteñida entre las sombras de la tierra.

“Fue la última vez que te vi. Pasaste rozando con tu cuerpo las ramas del paraíso que está en la vereda y te llevaste con tu aire sus últimas hojas. Luego desapareciste. Te dije: ¡Regresa, Susana!”

Pedro Páramo siguió moviendo los labios, susurrando palabras. Después cerró la boca y entreabrió los ojos, en los que se reflejó la débil claridad del amanecer.

Amanecía.

(Pedro Páramo de Juan Rulfo)

Los límites temporales se vuelven difusos. Hace una semana las comidas de amanecer eran duchas. Pero me gusta. Andar por Madrid y sentirla como vieja y apunto de renacer. Como un fénix que se convierte en cenizas para volver a ser.

Amo a (la) Luna. Y odio las experiencias oníricas realistas. Es contradictorio. No me interesa observar acciones improductivas que postergan obsesiones, no. Me he acostumbrado a pasarlo mejor estos días allá lejos que sobre la tierra. Y me da miedo quejarme, a ver si voy a dejar de recordar.

17 de mayo. Mayo decepcionante. Como septiembre, diciembre, febrero, abril.

20

Último examen de Bachillerato Internacional. ¿Bachillerato Internacional? Ese modelo de estudios tan raro que suena a bilingüismo y a elitismo poco fundamentado. Fue creado en los años sesenta como solución a la falta de equiparidad internacional en los estudios de hijos de diplomáticos. Su carácter “internacional” y un modelo de estudios relativamente moderno y complejo, además de una creciente exigencia para cursarlo, le dio la suficiente fama como para convertirlo en ejemplo de educación de calidad (casi) gratuita en los pocos institutos públicos donde se impartía. El Ramiro de Maeztu fue el primer centro español en adoptarlo en los años setenta. Los alumnos cursaban obligatoriamente Matemáticas, Física y Geografía (además de Teoría del Conocimiento, Historia, Lengua A1 y A2…); todas a nivel superior. Poco a poco el sistema fue degenerando en estudios más flexibles, puesto que ningún gobierno de España se preocupó en que unos cuantos centros del país cursaran dos bachilleratos completamente diferentes a la vez. Me he encontrado con profesores poco motivados (dada la absoluta falta de incentivos y remuneración), medios insuficientes y una pésima organización que ha hecho mis estudios una experiencias prácticamente autodidacta, puesto que los conocimientos están orientados, centrados y estructurados de una forma totalmente diferente a lo programado en LOGSE. Ha sido un problema al que nos hemos enfrentado todos, y posiblemente lo más patético de todo la pseudo-fama del BI.

Pero he aprendido muchísimo, tanto de conocimientos teóricos como prácticos (¡Stalin, enzimas, vectores, Nietzsche, meteorización! xd). He madurado; me he obsesionado; he sufrido, he querido, he odiado. He conocido a gente increíble y no tan increíble. He compartido clase con unos compañeros totalmente impresionantes que han logrado soportarme (eso es algo muy, muy difícil xD) y entender mis excentricidades. No tengo palabras para agradecérselo. Bueno, claro que tengo porque afortunadamente cuento con suficiente capacidad para expresarme, pero es demasiado emotivo y sufsu.

Han sido dos años complejos. Ni mejor ni peor. No sabría decir cómo hubiera sido quedarme en el Mirasierra porque no me he quedado en el Mirasierra. Pero veo esa época tan lejana que ni puedo planteármelo. Han sido dos años diferentes. Y todo gracias al BI. Ese conjunto de dogmas burocráticos y deshumanizados, representados en malas traducciones mal pagadas en Sudamérica. Trabajos que nunca pensé que sería capaz de hacer. Tampoco pensé que sería capaz de escribir 16 caras en un examen durante cuatro horas xD. Pero me ha dado esto. Yo mismo, vosotros, discusiones, viajes, risas.

Gracias. Por todo y por nada. A mí mismo y al maldito Bachillerato Internacional.

Y a falta de más, necesito dos entradas para cuatro días increíbles con un niño pequeño, un perro pachón, una madre autoritaria, un abuelo borracho, una hermana huraña y mi hijo. Sois geniales y saber que apunto he estado de morir por saltar balcones (con el fin de bailar, eh), drogarme a más no poder y descubrir caminos alternativos por montañas (producto del levantamiento del zócalo originado por el Macizo Herciniano debido a las fallas en la Orogénesis Alpina RECORDAD); colarme en propiedades privadas de traficantes de droga o dormir en un cuarto superpoblado.

26

Sirius, esto se hace pequeño. El teclado, esa segunda mano con estilografía en serie, no siempre se convierte en un instrumento mágico. Lo que significaba que un breve temblor en una letra mayúscula o una excesiva concentración de tinta sobre tres puntos suspensivos nunca podrá ser recuperado por una máquina. Pero es diferente. Menos personal. Enseñar tu letra es como mostrar tu expresión facial. Engaña, sí; pero también dice demasiado.

Echo tantas cosas de menos. Y ya estoy harto de culpar a los sueños cuando ¿sólo? reflejan subconsciente. Eché de menos a Dumbledore cuando Ron se enfadó o cuando Tonks fue a luchar con Lupin abandonando a Teddy.. Y, sin duda, mi personaje favorito es Luna Lovegood. Hermione es como Dumbledore y Harry. Sustancial. Fundamental. La historia no tiene sentido sin ellos, no podría continuar; y Sirius es uno de los padres. Creador. Complementa y centraliza.

Estudiar y pegar carteles. Mayo termina. Parece que fue ayer cuando terminó abril. Y cuando terminaron marzo, febrero, enero. Esta agilidad temporal me desconcierta. Los conceptos primarios me resultan cada vez más extraños.

A veces me siento un desconocido. Ayer me miré al espejo y no me reconocí. ¿Será la auto-cognición un factor otroreizante? Y si se transforma, la premisa se convierte en uno de los dilemas básicos.

Junio

6

Odio este calor. Odio saber que utilizo el verbo ‘odiar’ para sensaciones que ni de lejos se parecen al significado. También odio ser consciente de que el odio, como la perfección, como la felicidad, no existe.

Odio este calor porque siento cómo cada maldito partícula de aire a mi alrededor me transmite energía. Estoy rodeado de energía. La energía que desprende una persona cuando se muere. También la energía de un recién nacido, de una persona que sólo se dedica a comer helados y ver series americanas o la de un perro. Odio no saber a dónde me dirijo porque no siento que soy libre como para entusiasmarme ante la falta de planes. Odio no sentirme valorado pero también odio, y profundamente, los excesos sin fundamento de admiración. Odio vivir lo de enfrente y fijarme en esto de lejos, como si de una historia se tratara. Pero es mi historia. La odie o no, tengo que convivir con ella. Odio tener un sistema biológico imperfecto que necesite de atención diaria. Odio tener que estudiar cuando NO QUIERO ESTUDIAR. Odio no poder vivir un ideal, pero también odio las sensaciones claustrofóbicas, y estar encerrado en mi pensamiento siempre será terrible.

Odio recordar mis sentimientos pseudo-amorosos/obsesivos con añoranza. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender. Odio no entender.

Pero me encanta teneros. Sentir que ODIO, pararme un momento y recordar caras, voces, números de teléfono de personas que me podrían responder. Cada una diferente.

14

Día surrealista. Genial. Se echaron en falta colores y mensajes del pasado. Pero surge una creciente sensación de armonía, de lógica. No somos gente con suerte. Debemos acostumbrarnos a esperar de todo lo peor, puesto que se espera lo que racionalmente debe de llegar. Es una espera realista. La fatalidad innata de todo recién nacido.

Y claro, en medio de este calor, llegan brisas de aire fresco. Sin pedirlas, ni siquiera sin haber pensado en ellas. Como la sensación que se tiene tras haber aspirado con fuerza. No es suerte, es un respiro. Y como tal, tiene un final. Y un inicio, y un final… y vuelta a empezar.

22

Y qué mas da si la suerte se reserva. Si te aprisiona el dolor de cabeza, si te confunden los sueños rutinarios, si la aversión sigue en aumento. Dos meses por delante. Playa, cielo, avión; y luego muchos trenes, música en cada hostal, olores, colores, vosotras. Nada depende del maldito destino. Está ahí. Y verlo, casi tocarlo, provoca que lo anterior no sea más que simple suspiro y alguna que otra sesión de Kill Bill [freak].

23

Cuesta aceptar la sinrazón. En algunas personas, es hasta imposible. No sé si uno se dará cuenta, después de engañarse pensando que mantiene diferentes puntos de vista, de que poco a poco la exigencia ha ido cerrando, convirtiendo las acciones en hijas de un mismo patrón. Y por supuesto, cansa. Cansan las malas maneras, la incapacidad de aceptar errores y la constante sensación de que absolutamente nada cambiará su parecer. Porque no se puede. Y como soluciones, está 1. olvidarse de ello actuando como si nada y vuelta a empezar o 2. enfrentarse. Cada día estoy más seguro de que un amigo debe hacer la primera acción. No como lo más moral, justo, necesario; simplemente como lo natural de la amistad. Porque las personas, pese a quien le pese, son como son. Aplicar el propio patrón de conducta a las acciones ajenas sólo trae enfrentamientos. Querer a alguien es tolerancia. Algo que da un asco enorme, bastardo; pero es lo que hay. La amistad, como sentimiento, es mayoritariamente irracional. La opción 2, por esta vez, no soluciona absolutamente nada.

25

Hoy siento el verano. Acostumbrado estoy a estíos húmedos y oceánicos en Galicia después de la masacre extremeña, estando yo en vientre materno. Mi cuerpo aprendió a repeler el calor después de lidiar con grados infernales y viento calimoso; el norte fue una salvación, y así me he elaborado. Hoy, ahora; con suaves ráfagas de viento (sin pelo vuelvo a amarlo) y sensación de FRÍO por el pecho. Además de un cielo precioso. Parece que estamos en África. Los cielos de Londres son mejores, pero no tiene estos atardeceres. Son atardeceres melancólicos. Los de aquí, aunque tristes también, te ayudan a evocar. Sin más. El cielo de Londres provoca suspiros.

12

No pude terminar a McEwan. Ni a Hesse. Pero hoy me comeré a Amis y a su gulag así que al menos habré hecho algo de provecho.

Tengo tantas ganas de volver a pisar las calles de Paris. De oler las calles de Londres, las formas de las nubes. Y más, más [consumo turístico euroblanco].

Tendria que haber supuesto que Bruselas y yo no podemos ser compatibles. Ya en Londres la lluvia sugirio que esto ocurriria. Londres no ha sido Londres, ha sido tristeza [xd].

no puedo hacer nada. nada. nada. al igual que en paris. relaciono mensajes inoportunos en la madrugada con angeles de la guarda que desaparecen; no quiero que vuelva a ocurrir.

empece a leer a doris lessing, escribi dos poemas y probe cosas que nunca habia probado. COSAS. experiencia. En fin. tengo miedo de estar aqui y escribir ortodoxamente es mision imposible.

23

Interesante: hachís de barrio y minimalismo en portugués. Playas atlánticas. Reminiscencias francesas. El Lido y el final de la Guerra Fría en tono cómico. ¿Acaso se me ocurrió comparar a Caddy con Eva Wilt? Pues debería haberlo hecho. Aunque las discusiones acaloradas brillaron por su ausencia en 2º. En fin, nada nuevo… o casi nada (intentaré no pecar de arrogancia inútilmente).

29

.. ello alguna vez? Al menos una, por cualquier circunstancia, es lógico. Casi lo correcto. Sentarse e intentar respirar con calma ante la sucesión de imágenes. Lo que más asusta es ponerse en marcha. El dolor entonces atrae, es como una morbosidad infundada. Supongo que hay dos estados anteriores al acto; uno: elegante, sobrio, clásico; la inmensa paz espiritual que aparece tras la aceptación y produce mirada de sabio resignado. Cuando no hay nada, pero nada de verdad. La otra: típica y casi natural. Desesperación, nerviosismo, confusión.

No comprendo si mi incapacidad para entender a estas chicas es culpa de Coppola o de esquemas erróneos. Pero es extraordinario encontrar adolescentes que se conviertan en sabios resignados. Es como encontrar a un ent en un bosque o el reflejo de un hada en un río. Algo mágico.

Septiembre

6

Everything-must-go

Supongamos que la inteligencia pasa a significar capacidad de entendimiento, de abstracción, de tolerancia (¡empatía!) en un idioma extra-ordinario. Supongamos que ser inteligente significa convivir intentando entender un mínimo a los demás; no a partir de lo propio establecido, sino de lo que LA OTRA PERSONA (puede que sea tan persona como tú, eh) dice haber establecido. Supongamos que inteligencia es confianza con fin de entendimiento. Según todo esto, y pese a quien le pese, las personas más ordinariamiente inteligentes pueden llegar a ser extraordinariamiente gilipollas. Y es increíble la cantidad de veces que un gilipollas extraordinario chilla de ignorancia.

SLMNK 09 graciasgraciasgracias. No quiero empezar una puta mierda la universidad. No quiero. No quiero. Último día del último verano como oficialmente adolescente. Es horrible. Aunque tenga una cama de matrimonio y un collage enorme de Londres pegado al techo con celo. ¿Y si las relaciones se estancan y las personas no? En fin, demasiadas preguntas. Largo verano. RIP al largo verano de mi vida.

9

Es increíble. Leer a Dos Passos y al instante darme cuenta de que casi salto la parada. Y coger el autobús, ese autobús de los tres que solía comunicarnos con nuestro mundo de tardes lluviosas y hamburguesas del McDonalds. Evito cogerlo porque siempre me entra una punzada en algún sitio. Seguro que no es en el corazón; puede que en el hígado, después de todo. Siempre está vacío. El autobusero mira para atrás con la esperanza de poder dar la vuelta antes de tiempo pero ahí estoy yo. Puede que la universidad no sea lo mío. Solía reírme de Cooper pero eh, la sensación de exclusión espiritual es enorme. ¿Y si sí? ¿Y si no? Mis preferencias bipolares me agotan, eso siempre será así. Y claro, pensar que sólo quedan 11 días para terminar oficialmente esto y NO QUIERO. Odio crecer. Aunque caiga en un pseudo-peterpanismo es horrible pensar que los 17 se han acabado, que la adolescencia (el brillo de las TARDES, de las azoteas, del verde, del Come What May, de fumar a escondidas, del teatro del absurdo) se quedará atrás. No quiero. No quiero. Odio que ocurran cosas inevitables que no me gustan. Estoy ansioso por tener libertad. De ésta que duele, que asusta y que te pierde. Necesito saber que puedo.

Running home [x]

13

25

Septiembre está pasando tan rápido y tan lento. Me explico para no parecer un intento de poetavacío que tan de moda está: pasa lento porque parece que dura MESES; pasa rápido porque el ritmo es frenético. Pero me gusta. Es incertidumbre. Hay tantas cosas que hacer y arreglar. Y tantas otras que simplemente dejar aparcadas.Y me da igual que sea París, Berlín, Dublín o cualquier ciudad alemana ininteligible. Vamos juntos. Es simplemente genial.

If you ever want mecome on and CRY, cry baby, cry baby, cry baby, yeah, oh, like you always seem to do.

Eres la mitad de mi verano, Janis. Te adoro. La otra mitad es la loca de los pulmones.

29

[Pzk., h]ay cosas que sólo tú y yo podemos entender. Como la magia de madrugada y a escondidas; abrir la ventana y ver la lluvia caer. Entonces sentir una enorme soledad y vacío. Pero respirar y oír cada gota y sentirte satisfecho. Sin más. Satisfecho.

Te voy a echar de menos. Siempre.

Octubre

2

Out beyond the streetlights

¿Qué ocurre? Octubre. Rutina. Desde que soy yo, mes infeliz y mes obsesivo. No me gusta octubre. Me gusta mi cama y ver Londres arriba. Y es que últimamente tengo demasiadas cosas pendientes. Me encantaría parar esto y, sin perder, comenzar una por una. No soporto ser tan susceptible, ya, pero nunca volverá a pasar.

¿Y ahora qué? No hay gran viaje pendiente. No hay persona lejana que se acerca. Hay un proyecto, y tiene que terminarse. Para vivir. Necesito encontrar ganchos. Y claro, no volverte a ver. Pero nunca más.

I’ll meet you by the drain

We’ll run through leaves and shopping trolleys, gathering in the rain

Cocooned in our nest of joyful folly

We have no home, this is our home

 

17

Tan-tas cosas. Por aprender. Es que es gracioso ver como palabras enormes son tan fugaces. TODO. Todo se dice en un momento y realmente quiere expresar todo. Es casi irreal. Una lengua real haría de todo una palabra infinita. Así nadie lo utilizaría con tanta facilidad. Y ¿amor? ¿libertad? ¿amistad? Pan, pan, pan. En una frase resumes la vida de alguien. Y vaya, esto no es ninguna corto-reflexión sobre el lenguaje. Me limito al flash emocional. ¡Como siempre! Qué hay detrás de, de todo, del control. Una palabra hace muerte y estremecimiento y tantas cosas. Somos palabras.

22

El amor es un gato bonito. Las caras bonitas son mentira.

Es horrible obligarse a hacer ciertas cosas con respecto a las relaciones. Horrible en todos los sentidos, pero es que a veces lo horrible es necesario. Por triste que sea. Parece que el fin acaba justificando los medios, porque si los medios son, sin más, irracionales, deja de haber fin. La historia termina. A veces simplemente es necesario oprimir[se] y hacer que algo ha terminado. A veces y casi siempre aquí. Y no, no debería. Yo creo en los actos impulsivos, joder, NECESITO creer en ellos. No entiendo por qué no coincide lo que debe ser y lo que tiene que ser. No lo entiendo.

Buy a ticket for the train

Hide in a suitcase if you have to

This ain’t no singing in the rain

This is a twister that will destroy you

Ay. Quiero que haga frío para que las calles estén casi vacías y la gente no grite ni mire ni nada. Simplemente hará frío y ya está. Madrid en invierno es genial. Es que hace tanto frío. Es jodido pero parece un enfrentamiento. Los enfrentamientos, al menos, son algo [?].

26

Parece que solo te quedan tres opciones. Puedes vivir con rabia, que te duela constantemente y que quieras matar. También puedes resignarte y aceptar que nunca, nunca serás feliz. Duele pero haría todo más fácil.

Lo último es recurrir a la química. ¿Sabes? Puede que hasta te vaya bien.

Si es que las cosas se intuyen. Desde un principio. A este paso dejemos de arriesgarnos… pero no, no. Nunca. Porque eso es Versalles, y detrás de tanta perfección elaborada se encuentra una enorme fuerza impulsiva [explotada]. Confiemos. Es lo único que queda.

31

Agota pensar. Noto un cambio. De estos espontáneos que duran un par de días. Me encanta ser tan volátil, en serio. Podrían encargarme un papel diario y lo interpretaría casi a la perfección. Ser y pensar y estar SIEMPRE igual es tan aburrido. Sería genial que existiera la posibilidad de rotación de identidades. Un día de cada mes, todas las personas de determinada ciudad se inventan su propia identidad. La de enamorados que saldrían de las historias inventadas; pero inventadas con justificación, con excusa. Las mentiras inoportunas destrozan relaciones porque no son ideales, por muy necesarias que resulten. Sería un día sincero. El único día del mes en el que uno puede sincerarse mintiendo sobre sí mismo.

Me encantan Pep y el desahogo artístico. Me encanta compartir ciertas cosas con determinadas personas. Es íntimo y da la impresión de que perdurará; no en la Historia, ¡a la mierda! Perdurará en [nosotrxs].

Noviembre

3

Me estoy dando cuenta de algunas cosas básicas:

-Soy incapaz de dejar de fumar. Es un asco pero no sé, no me apetece una mierda.

-Las pre-relaciones y los pre-fracasos son jodidamente complicados. Al menos cuando no hay mucha experiencia.

Y creo que ya. Pensé en más mientras tendía la maldita ropa mojada en la terraza para que no oliera mañana a percudido pero mi memoria no llega para tanto. Ah, y ni hablar de Bertolucci porque o escribo un libro de mil páginas o me tiro por la ventana. Al menos por ahora.

7

Mira que podría estar lloviendo. Así haría chocolate con razón y vería alguna película antigua. Me encanta que llueva porque lo veo todo desde dentro. Parece que la lluvia cae en el mismo salón.

En fin, hay cosas que nunca cambian. Otras directamente desaparecen.

14

Ayer fue el cumple de Gabi. Apenas estuvimos con él porque está conociendo nuevos mundos y necesita que le suelten. Lo necesitaría absolutamente, pero no está preparado. O eso cree él, o eso creo yo. No, yo creo que siempre estamos preparados. Porque si un día llegas de la universidad y tus padres han muerto en un accidente de tráfico, el no estar preparado te convertiría en un enfermo mental o en un suicida. Estar preparado no significa saber de antemano lo que va a suceder, sino ser consciente de lo jodidamente bruscos que son los giros de la vida. Y, como leerás algún día o nunca, ¡estrújala!

Hoy es el cumple de Bea. Es gracioso esto de celebrar cumples. Una convención tan evidente. La veré después de dos meses y tengo ganas de tocarle el pelo y meterme con ella. Ains.

De vez en cuando, pero sólo de vez en cuando, recuerdo lo que está y lo que no está. Mientras tanto sigo leyendo y buscando series nuevas por internet. La mayor parte del tiempo funciona, en serio. Es ceder, como la NEP soviética. Qué si no. ¿Te busco? ¿Acaso lo hago? ¿Acaso pienso si quiera? Mi subconsciente es mi subconsciente y mi consciencia es mi consciencia. Debería presentar una a la otra y obligarlas a que se llevaran bien, pero repito: no. Prefiero pensar en Paris; en los ronquidos de Kitten, la maraña de pelos que constituye Inma al dormir y la eterna sonrisa de Jel. Prefiero imaginar cómo os enseño esta y esta otra calle, cómo abrazo a Aurore y cómo nos sentamos en la orilla del Sena para comer un kebab mientras pensamos en Cactus y en su antigua cámara [imagen-vampiro]. Sólo eso. Estar con vosotras y estar allí. Es más que suficiente para creer que todo va bien. Y sólo a veces…

Stupid me to believe I could depend on stupid you. Y cuánto se repite que uno siempre estará solo. Suena a cliché, pero es eso o estar siempre acompañado; porque tener amigos/pareja no excluye la posibilidad de que uno se sienta solo en algún momento de su vida, por lo que no no estar solo -> estar solo. Una soledad esencial. Yo no lo entendí hasta el 11 de julio del 2008. Algún día escribiré algo sobre lo que ocurrió entonces. Dios, mi mente avanzó un año espiritual entero. O más. Pero nunca, lector, crea que puede depender de alguien. Si se deja llevar, hágalo sabiendo que habrá consecuencias. Volvamos a clichés: los excesos siempre son malos. Si vivir es live fast and die young… adelante. Y sin sentido, porque no paro de soñar; no me pasaba desde hacía mucho. Estoy lleno de imágenes, de conversaciones, de miradas, de todo. Quedan 6 días. Al menos he tenido fuerza de voluntad.

Ay. No quiero estudiar.

Diciembre

1

Todo gira demasiado rápido. Gira, se mueve, avanza, retrocede. Movimiento. Pienso en futurismo y me entran arcadas. Casi como en el 2008.

Nos vamos a París cuatro días a casa de una amiga de Inma. Tengo miedo de lo que pasará al volver. En fin: diciembre. Volvemos a terreno conocido.

Qué jodidamente raro es todo. Quizá necesite realmente irme al campo y fumar mientras miro las estrellas. Sin nadie a mi alrededor. Soy un puto personaje. En serio.

10

De repente llegan estas cosas, y es que no sé cómo coño tomármelas. Me dan ganas de gritar y decir “eh, vale, dejemos de mirar esto desde fuera y entremos”. Porque sigo teniendo la sensación de que no vivo algo mío. Lo mío son subnormalidades. Dios, y cuántas. Y para los lectores inexistentemente incondicionales, volví a llorar con El retorno del rey. Sólo al final. Cuando Aragorn, en su coronación, decide arrodillarse ante los cuatro hobbits y todos los invitados le imitan. Es que Las dos torres tiene momentos más emotivos: cuando Gandalf es -por fin- reconocido como mago blanco. Y por dios, qué fallo de los guinistas poner en boca del Ent lo de “joven mago” dirigiéndose a Gandalf. Joven, dice. Y que se le tenga tan poca consideración. No entiendo por qué hasta pretende temer al idiota del Nazgul él. Bueno, resulta que volví a empezarme El Silmarillion.

En fin. Esto es una mierda.

Qué hacer con tanto.

13. Cuatro años. No sé qué ocurrirá al quinto, pero seguirá ahí. Invariable.

17

Hoy ha sido un día terrible. Bueno, terrible no; simplemente estresante y jodidamente raro. Llevo desde las 10:30 con el pecho sin pelo y lleno de cables. Me he recorrido medio Madrid sin mucha idea de adónde ir. Ay, el descontrol. Somos todavía unos niños. No quiero ni pensar qué hubiera acabado pasando sin esos dos [?].

21

Hace dos años escribí en deseos para un futuro [del space de Messenger] “Que llegue la Navidad del 2009. cwm”. Y ahí ha seguido. Incluso continúa en cosas que me gustan “Ir una vez a la semana con LC al cine (L)”. Respecto a lo primero: ja. Es, más que irónico, paradójico. Porque best friends means friends forever, y no ahora tengo 19 años y aun así te saco la lengua. Es frustrante. Horrible. Como una puta astilla metida entre el dedo y la uña. Si lo pienso me dan ganas de llorar. Como tantas cosas de este año, tantas cosas. Y esto se acerca, pero sólo por encima. Porque, aun así, compararlo con lo que podría haber sido L.09 resulta desesperanzador. Creo que hubiéramos seguido unidos. Uniéndonos cada vez más, ¿sabes? y resaltando individualmente al mismo tiempo. Ha llegado el invierno. Hoy, no hace un maldito mes. Hoy no debería estar aquí. Debería estar con vosotras. Llegando tarde de trabajar, jodidamente muerto de frío y con ganas de meterme en la cama. Pero con la seguridad de que sólo tengo que cantar una canción para no estar solo.

No me gusta que las cosas se acaben. El 2009 ES el 2009, pero invierno es invierno y siempre lo será.

29

Caos. Diciembre es caos y tiempo. Lo empecé en París y lo terminé Túnez, que qué diablos se me ha perdido en esos lugares. En fin, mes enorme y frenético. Me he sentido vivo. He hecho tantas cosas: como leer y pasear y drogarme y sentir una cama y llorar, montar en un tiovivo y en camello, ver un autobús hundido en el fondo de un lago salado seco… vida. No a lo Kerouac, todo pseudo-simplificado o mal vanagloriado; sino vital, puro, sin prisas por exhibir y sin ganas de implicar. Hace unos días sólo quería seguir escuchándote y hasta tocarte, joder, tocarte bien. Diciembre es tan terapéutico. Aquí y en África; en serio. De repente te das cuenta de que no lo piensas, y piensas “vaya”. Así se acaba. Así se empieza y así se acaba. Como cuando tuve unos meses I don’t love you anymore de Alice ahí arriba. El tiempo te dice lo que hay, lo que no hay y lo que no puede haber. Para él, claro. Lo demás tiene uno que descubrirlo.

Odio los malditos hospitales de ancianos, pero me encanta saber que voy a ver a Sara y a darle sus regalos. También el olor a lluvia en Madrid y las luces y mis amigas. Pero no me gusta ir de compras. Ahora no. Quiero matar y comer chocolate de verdad.

Dos días.

Cómo hacer si te pierdes en la niebla

Cómo localizar al fantasma

que tiembla entre mis pelos,

cómo hacer con la sombra

que solo está,

delante de mí,

vacía a mi caricia.

La niebla densa se convirtió

en espesa espuma;

el viento solo es puño

y las nubes, en esquinas

como stops de un paseo

diseñado en las ruinas

de la Naturaleza,

presa en su celda de cristal.


Me refugié con mi soplo

debajo del rollo de papel cocina

y mi brazo derecho empezó a temblar,

signo de las estacas

con las que solía hablar.


El aire entra en mí 

como un manantial que se folla a la tierra

para volver a brotar.


Mi dulce cuerpo de bellas curvas

que amenaza a la altura espacial

El sonido hiperreal del mundo

ahogándose por encontrar

recuerdos que confirmen 

que ya fui,

en este lugar,

del escenario al suelo

sin cruzar el ventanal

del pathos, que me enseñaron

al no-caminar.


Y los cristales clavados en mis pies

son como lágrimas: escasas e invisibles

hasta que el sabor de sal 

sinestesia mi boca

que aúlla 

como los pájaros al piar.


De mis ojos salen ríos

 y me baño en luz.

Abajo el mar está oscuro

pero vibra sobre la tierra

y entonces luz,

y entonces agua.


Y si por dudar

elijo dejar de hacerlo,

me puedo bañar 

en la idea inmensa 

de las gotas de agua 

que al suelo a divertirse caen,

al fuego de la eterna fiesta 

de las cosas por existir.


En un mar de charco 

abriré bien mis axilas 

para escuchar con atención

al húmedo vacío bailar.

Le haré una foto

y dormitaré por un par de siglos

en el barro.


20/3/2014, Madrid

Fumo monstruos

mayo/2015

El monstruo de cien caras

está ahí fuera

supura el llanto encerrado

de este laberinto

engrandecido al infinito

por salvajes arbustos

que tapan sin piedad

los caminos cuyo tránsito

imagino,

hasta que pinchan

los tonos ácidos

que escapan entre colmillos,

hasta que me agarra el rostro

y me aterroriza los cimientos.

Me fumo envuelta en mis venas

la sangre verde y marrón

del monstruo

que vende ojos sueltos por las esquinas